#15

7K 678 8
                                    

Sam: ¿Y qué tal con el chico que te mandaba mensajes como loco?

Yo: ¿Quién?

Sam: No sé. El tío que te madó mil mensajes en la fiesta.

Yo: Ah. Al fin me ha dejado de hablar.

Sam: ¿Al fin? Parecía muy amigo tuyo. Quitando el hecho de que no sabía tu nombre. Los pocos minutos que hablé con él, ya me cayó muy mal.

Yo: ¿Por qué? Es... Buena gente.

Sam: ¿Buena gente?

Yo: Sí, es simpático a veces.

Sam: Bueno, ¿algo que hacer el sábado por la noche?

Yo: Estudiar. El lunes tenemos examen y...

Sam: Ya, ya. Es sólo un examen, aprueba los demás y ya está.

Yo: Ese es el problema, los demás no están aprobados.

Sam: Puf... Ed va a hacer una fiesta...

Yo: Eso no va a cambiar nada, Sam.

Sam: Vale, me iré a molestar a otra persona.

Yo: Estoy de acuerdo.

Sam: Pero, si te aburres estudiando, ya sabes a dónde ir.

Yo: Sí, me aburriré, pero no iré a esa fiesta.

Sam: ¿Por qué no? Antes me acompañabas a todas.

Yo: Ya no... Me divierten.

Sam: Aburrida.

Yo: Lo he aprendido de ti.

Sam: Ya, claro. Una pregunta.

Yo: Oh...

Sam: ¿Qué pasa?

Yo: Nada, dime.

Sam: ¿Sabes que me puedes contar cualquier cosa, no?

Yo: Sí. ¿Y eso a qué viene?

Sam: Te veo distante.

Yo: Bah, olvídalo. No es nada.

Sam: Eso espero...

Yo: Cuéntame el sábado si mereció la pena ir.

Sam: Te puedo responder a esa pregunta ahora.

Yo: No, gracias. Me voy a hacer los deberes, ahora me preguntarán mis padres si he empezado.

Sam: Vale, pásatelo bien.

Yo: Sobre todo eso.

Sam: Adiós, un beso.

Yo: Adiós.

Te has equivocadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora