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— ¿Cómo te sientes? ¿Estás bien? — asintió suavemente dejando que el aire fresco del día refrescara su rostro dándole tiempo para pensar en la respuesta que su amigo esperaba  escuchar.

Respuesta que tenía en mente pero que no era tan fácil expresar, no después de haber estado con su esposo de manera íntima y que fuera algo de lo que no debía hablar a la ligera con nadie.

No podía hablar de su intimidad tan libremente; no era algo digno de ningún Omega.

— ¡Te hizo daño!

— ¡No! No me hizo daño.— negó con rapidez alterado por la suposición que Jimin formuló en su mente.

Más aún por no saber si alguien más los podría estar escuchando detrás de las puertas y vaya a contarle a sus padres algo de esa conversación. Especialmente ahora que tenían un repentino interés en saber lo que estaba pasando con su nuevo esposo.

Después de esa noche no ha vuelto a estar con su esposo íntimamente; dormían en la misma cama como matrimonio, compartían habitación y las rutinas mañaneras de cada uno pero no habían vuelto a intimar, algo que no sabía decir sí era bueno o malo.

Se sentía tímido e inseguro alrededor de su esposo de una manera vulnerable que sabía se debía a su falta de socialización y el nulo contacto que mantuvo con el exterior. Ahora tenía esposo aunque fueran solamente dos desconocidos tratando de convivir como esposos, de hacer que lo que empezaban a tener fuera funcionando.

Le tranquilizaba un poco que en ningún momento después de aquel día de la ceremonia su esposo no lo haya tratado mal y que mucho menos le haya dicho palabra denigrante hacía su persona como supuso lo haría apenas estuvieran solos en la alcoba.

Muy en el fondo de su corazón y Omega tenía miedo de que llegado el momento cambiará su actitud y dejara de tratarlo amablemente quizás aún era demasiado pronto para que fuera agredido como todos los demás lo hacían.

—Me tranquiliza saber que no té lastimó.. me preocupe tanto por ti esa noche..aún sigo sin perdonarme el no estar a tu lado para protegerte.— el tono quebrado en la voz de Jimin le advirtió del sentimiento de culpa y remordimiento que albergaba su corazón.

El llanto podía encubrirse con la suavidad y tono de voz, incluido el casi imperceptible aroma que emana. Mucho más que cualquier otro Omega, la sensibilidad de sus sentidos era mucho más desarrollados que la de los demás.

— De nadie es la culpa.. No tienes que preocupar por ti ahora.— Calma con suavidad, sabe que sí no se muestra alterado hará que jimin baje su preocupación y deje de culparse por cosas que no estaban en sus manos.— ¿Cómo te fue en casa de tus padres? ¿Ellos están bien?

Pregunta en cambió, sabe que de otra forma no hara cambiar los pensamientos de su amigo.

— Quieren que me case cuánto antes, la edad que tengo no es agradable para algún prospecto.. — la tristeza siendo palpable en sus palabras.

Mortificado de la situación en la que se encuentra y asustado por lo que significa ser desposado, más aún para Jimin quien desde niño ha dejado en claro que no desea casarse con nadie.

— Recuerdo que en su momento me dijiste que no querías casarte.. pero ahora, ya ha pasado bastante tiempo desde ello ¿No quieres casarte? ¿Te sigue desagradando la idea de tener pareja?

Pregunta con suavidad y lentitud sabiendo la respuesta, Jimin jamás ha mostrado indicios de enamorarse o de si quiera mostrar interés en alguien.

— Sigue en pie mi desición de no casarme, ni el ultimátum de mis padres hará que cambié de parecer.— afirma Jimin con voz encubierta de calma pero dejando ver su enojo y frustración.

Luceros vacios 💜 YoontaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora