Jimin sólo tuvo que mirar a Jungkook para darse cuenta de que para él lo que acababan de compartir no había sido más que sexo, una simple liberación física. La idea de que sus almas hubieran unido sólo había sido una fantasia provocada por la emoción de su primera experiencia sexual. La frialdad que veía en sus ojos le decía que él no compartía
dicha fantasia.Una vez superado el calor de la pasión, Jimin se sintió mareado y comenzó a temblar de frío y de miedo. Sin embargo, el orgullo le decía que debía ocultar todas esas emociones.
—Era asunto mío— Murmuró como si el hecho de haber perdido la virginidad no fuera nada importante para él. Eso no consiguió apaciguar a Jeon.
—Pues ahora lo has convertido en asunto mío también— Replicó duramente. —No tengo por costumbre seducir a hombres virgenes. Si me lo hubieras dicho, habría parado.
—No quería que lo hicieras— dmitió Jimin con total sinceridad. La intensidad de la pasión que Jungkook había despertado en él había sido toda una revelación y, durante un rato, se había olvidado de todo excepto de la necesidad de satisfacer aquel deseo. Algo de lo que ahora se arrepentia.
Jungkook se había apartado de él y lo miraba fijamente, con desconfianza. Jimin supo de inmediato qué era lo que le preocupaba. Todo el mundo sabía que tenía verdadera aversión al compromiso, así que seguramente se preguntaba qué quería él de él, y enseguida le dejaría bien claro que no iba a recibir absolutamente nada. Quizá temía que él se pusiera sentimental; no sospechaba que habría preferido morir antes que dejarle ver hasta qué punto lo trastornaba.
Se cerró la chaqueta para ocultarse de su vista y se sonrojó al ver en su rostro una mirada irónica con la que Jungkook le decía que era un poco tarde para mostrarse recatado.
—Si quieres que te sea sincero, lo cierto es que la virginidad se había convertido en una especie de obstáculo— Le dijo, tratando de sonar convincente a pesar de que estaba a punto de echarse a llorar —Quería que la primera vez fuera placentera y quería que fuera con un hombre, no con algún muchacho torpe y sin experiencia. No pude resistirme a tu fama de buen amante y la verdad es que no me has decepcionado...— Le temblaba ligeramente la voz —Siento mucho si mi comportamiento no ha sido lo que esperabas.
—No digas tonterías. No estoy decepcionado y seguro que, a pesar de tu inexperiencia, te has dado cuenta— Respondió secamente mientras recordaba el placer que había sentido —Has estado increible, agapi.
Jungkook se tumbó boca arriba y clavó la mirada en las sombras que el farol proyectaba en el techo de la cueva. Una vez superada la sorpresa de saber que era su primer amante, tenía que admitir que había sido la mejor experiencia sexual que había tenido desde hacía mucho tiempo. Miró a Saúl y comenzó a relajarse, aliviado de que no intentara acurrucarse junto a él. Parecía que no había motivo para preocuparse; había sido su primera vez, pero conocía las reglas del juego. Si tenía la certeza de que no le exigiría nada, no había razón para no verlo de vez en cuando en sus visitas a Aristo,
—Yo también debo confesarte algo— Dijo él, tumbándose de lado.
—¿Estás casado?— Preguntó Jimin, con el corazón encogido.
—Thee mu... no!
De pronto le pareció tan lejano que Jimin se preguntó cómo había podido cometer la locura de de tener su primera experiencia sexual con un completo desconocido.
—Estoy divorciado— Dijo con una sonrisa triste —Y desde que aparte a mi ex mujer de mi vida, soltero y sin compromiso.
Jungkook sintió ese oscuro odio que le era tan familiar y que lo invadía siempre que pensaba en la mujer a la que una vez había creído amar, con una amargura que se mezclaba con la rabia que le daba haber sido tan estúpido. Nunca más, pensó con furia. La traición de Greta había supuesto una dura lección que había aprendido bien. Nunca más volvería a confiar en una mujer porque, como había descubierto de la peor manera posible, no eran dignas de dicha confianza.
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Un príncipe para un millonario ━ Kookmin
Fanfiction𝐊𝐎𝐎𝐊𝐌𝐈𝐍┊El sencillo Park Jimin era el príncipe olvidado... hasta que tuvo que ejercer de anfitrión del baile del palacio. Lo planeó todo a la perfección, pero no tuvo tiempo de encargar un traje que dejara boquiabiertos a sus invitados y disi...