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Enzo se acercó junto con Juli y el último nombrado le pegó en el brazo al morocho para que hablará. Este lo miró mal y bufó llamando mi atención
— Julieta de mi corazón —pidió sentandose a mi lado
— qué pasa Enzo? —lo miré
era obvio que me iba a pedir algo, y si era sincera, me asustaba lo que me podría pedir alguien como él
— vino Valen con Oli —comenzó— y ella quiere que salgamos a recorrer un poco, Julián y su novia también vienen. Y estaba pensando en... no se, si podrías cuidar... —quisó seguir
pero fue interrumpido por mi emocion
— a Olivia? si, si si! —acepté gustosa. Después de todo, yo amaba a la pequeña y se podria decir que nos llevabamos bien
Enzo sujetó mi rostro y beso mi frente sonoramente
— gracias, sos increíble negrita. Te amo —dijo y Juli asintió apoyando sus palabras
solté una risita y justo en aquel momento Enzo levantó la vista disimuladamente y se volvió a acercar para susurrar en mi oido
— ahi viene tu varoncito —se alejó sonriente y se levantó del asiento
— qué decís? —lo empujé levemente
una mano se posó en la mesa a mi lado y me obligué a elevar mi mirada. Tuve una vista perfecta de Lisandro desde abajo y admiré su mandibula tensa y su ceño fruncido
así se verá cuando...
en qué estoy pensando?
— tranqui, no te la robamos, o si? —jodió Enzo
— a quién vas a robar vos salame? —chasqueó la lengua
volví mi vista hacia el dúo frente a mi y Julián escondía una sonrisa mientras Enzo se acercaba a dejar un beso en mi mejilla solo para molestar a Lisandro
— después te llevo el paquetito a tu habitación —avisó haciendo referencia a su hija
negué levemente mordiendo mi labio para esconder la sonrisa de ver a Enzo tentar a Licha y él enojandose aún más
— bueno, bueno. Chau, vayan nomás —los corrió Lisandro— necesito hablar con ella
se sentó junto a mi y colocó una mano en mi muslo sin vergüenza alguna. Enzo elevó ambas manos en señal de inocencia antes de retirarse con Julián
— qué necesitabas Li? —lo miré sonriendo
— a vos —colocó una mano en mi nuca— pero además de eso sacar al cargoso de Enzo
— cargoso? por qué? estabamos hablando —me hice la tonta
— ah si? diciendote cositas al oído y dandote besos? —interrogó
