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luego de la cena familiar, Licha me invitó a salir de joda con un grupito de amigos que tenía en el pueblo. Obviamente acepté y ahora me encontraba moviendome al ritmo de un rkt
aunque no lo crean, yo era una nena wachiturro de más chica. La verdad la pasaba muy bien viendo videos de Jorge y Nacho y tratando de vestirme como ellos. Mis papás solían reírse de mis coreos pero aún así le ponían onda y me alentaban
— mami yo te he visto, tu llegas a la disco junto a él —cantó uno del grupo y lo señaló a mi novio
— yo no me resisto, tu bailas y la disco se quiere romper —canté sonriente
— amor, me acompañas a buscar para tomar?
lo miré y asentí
casi llegando a la barra la canción cambió por otra del mismo género. Apoyé mis codos sobre la barra dándole la espalda a mi novio mientras se movía al ritmo de la música
pidió la bebida al barman y moví mi culo sobre su miembro, solo con la idea de tentarlo y ver qué hacía
— en la discoteca voy a darte y parte por parte yo voy a azotarte —cantó bajito sobre mi oído y sujetó mi cintura impidiendo mi movimiento
se enderezó y aceptó el vaso gustoso. Tomó mi mano con delicadeza y, esta vez, tomó un camino distinto por el que vinimos
cuando llegamos a los baños descubrí su intención pero para mi desgracia ya era demasiado tarde para negarme, además tampoco querría negarme
nos encerró en un baño vacío y le dió un trago al vaso antes de apoyarlo sobre la mochila del inodoro. Me obligó a pegar la mejilla contra la pared sosteniendo mi cabeza y dejó un golpe en mi culo, lo cual fue posible debido a que llevaba una pollera y me había inclinado
— a ver, tanto que te gusta jugar pedazo de puta. Bancate jugar con esta —hizo mi tanga a un lado
escuché el cierre de su pantalón y un sonido como de un paquetito, supongo el forro. En tiempo récord se lo había puesto y ahora rozaba con mi entrada
— a-ay Lis —exclamé cuando entró solo la punta
antes que pudiese reaccionar se adentró por completo robándome un gemido y soltandome la cabeza para ahora sujetar mi cuello. Me obligó a pegar mi espalda con su pecho mientras se movía y mordí mi labio evitando seguir gimiendo
la música estaba alta pero aún así no quería hacerlo
— a ver, gemime ahora trolita. Dale, no seas mala, te quiero escuchar —pidió contra mi oido
solté otro gemido cuando me penetró de manera brusca llegando muy dentro mío. Escondió su cara en mi cuello comenzando a repartir varios besos y dejar leves marcas
escuchaba nuestros cuerpos chocar desenfrenadamente y la música de la joda al mismo tiempo. Mi cabeza quedó en blanco debido al semejante placer que me estaba haciendo sentir él sumado a la adrenalina de que alguien nos pudiese ver
— que terrible orto que tenes mi amor
mis piernas temblaron ante sus palabras y rápidamente sujetó mi cintura para tener más control de sus movimientos. La sentía dar contra un punto muy especial dentro mio y eso me hacía imposible el evitar gemir
coló una mano debajo de mi top y apretó una de mis tetas sin bajar el ritmo de sus movimientos. Sabía que yo estaba por acabar pero él parecía estar un poco más lejos
cuando mi orgasmo envolvió su miembro, me giró y me obligó a arrodillarme. Tiró el condón al inodoro y comenzó a pajearse en mi rostro
— abrí la boquita y saca la lengua, a ver —sonrió maliciosamente
cumplí con su pedido sintiendo como se me hacía agua la boca. Aproximadamente un minuto después el líquido salió disparado a mi lengua y con su mano libre me sostuvo para que no me alejara
soltó un gran suspiro entrecortado y subió su pantalón para luego ayudarme a levantarme y a acomodar mi ropa
— estas bien? —sujetó mi cintura
— si, mucho mejor que antes —agarré el vaso y le dí un trago
— sos una forra. Traes pollerita y me bailas como si nada —mordió su labio inferior escondiendo su sonrisa— después cuando lleguemos vas a tener tu castigo
— castigo? y esto qué fue? —relamí mis labios llevandome el exceso de alcohol en los mismos
— esto, una advertencia. Y mi entrada, falta el plato principal y el postre, asi que no te canses tanto —me besó
— vos te estas abusando ya —hice un pequeño puchero
— no te hagas que te encanta. Si te portas bien, después vamos y te compro maquillaje y algunos chocolates, te parece?
— me parece un buen trato Martinez
sali del baño con el vaso en la mano y siendo seguida por mí novio
— Martinez? por qué? yo soy tu amor, no soy Martinez para vos —frunció el ceño
rodee los ojos ante su drama y volvimos a la ronda de sus amigos. Al notar la canción que estaba sonando sonreí divertida y moví mi cuerpo al ritmo de la melodía
— toda la noche lo pensé. Este es pa' mí o pa' más nadie —seguí la melodía y Licha sujetó mi cintura
sus ojos estaban fijos en mis movimientos y así comenzó un nuevo juego para tentarlo. El cuál me tarde terminaria quitandonos las ganas en su auto y, por último, en su cama, en la casa de sus padres
tal y como dijo, tuvo entrada, plato principal y postre. Ahora le quedaba cumplir con su parte del trato
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