Tiempo de Promesas⌠TanjiSen⌡

Capítulo13;

Kyojuro respiro hondo después de que Tengen soltó sus labios de un sucio e indecente beso, las manos expertas del otro alfa acariciaban su cuerpo encendiéndolo como un pequeño botón en su interior, llevaban varias horas haciéndolo, simplemente no podían parar, era como una necesidad imperiosa de estar enterrado uno en el otro, ¿Cómo siquiera Tanjiro podía ser funcional al lado de Senjuro? ¿Con fuerza de voluntad? Si era así lo admiraría el resto de su vida, con Usui no podía mantener fuera su lengua de su boca, sus labios fuera de ese cuerpo esculpido y ni hablar de su verga, no importaba quien estaba arriba, lo único que importaba simplemente era sentirse en el otro.

— Usui — dijo sofocado tratando de tomar aire a través del placer.

— Usui espera — Kyojuro trato con pocas fuerzas alejar al otro alfa, Tengen solo murmuro con su boca pegada a su cuello.

— ¿Es normal esto? — pregunto casi inocentemente Kyojuro, ahora tenía la atención de Usui, porque alzo la mirada herida hacia su compañero.

— ¿Qué esto? — pregunto.

— Esto, el no poder mantener las manos para uno mismo estando juntos, lo único que hacemos cuando nos vemos es follar — Usui sonrió con picardía.

— Es normal, al ser alfas nuestros instintos de apareamiento es complejo, estamos en periodo de luna de miel, se nos pasara — aja, Kyojuro no lo creía del todo, solo esperaba que llegara el momento en que pudieran mantener una conversación completa sin tener las manos sobre el otro todo el tiempo.

Kyojuro gimió, entregándose por completo a su compañero que ya hurgaba en su interior, malditas manos mágicas, si fuera omega ya lo tendría babeando el muy imbécil.

Todos se estaban preparando para ir a la cama, por supuesto Tanjiro no quería dejar a Senjuro, habían pasado una maravillosa velada y no tenia deseos de soltarlo, aun, pero el alfa sabía que debía hacerlo, se vería muy mal visto si Senjuro saliera a hurtadillas de su habitación en medio de la noche, pero sus deseos de tocar al omega de formas indecentes eran grandes, tan grandes que no pudo evitar tomar su muñeca y arrastrarlo de vuelta adentro de su habitación, Senjuro estaba igual o peor que él, su respiración jadeante y sofocada lo decían todo, lo desea y fue lo único que necesitaron los dos para besarse arrebatada y violentamente, al diablo los protocolos ellos querían sentirse y se entregarían al sentimiento sin resentimientos.

Ambos cayeron al tatami, revocándose entre sí hasta que Senjuro quedo sobre las caderas del alfa, arrebatándose como desesperados la ropa estorbosa, sería la primera vez que se vieran desnudos, estaban nervioso y excitados.

Senjuro dio un gritillo acallado entre las palmas de sus manos, Tanjiro había empujado clavando su dura verga entre las nalgas desnudas del omega, rosando el ansioso y húmedo ano y se sintió demasiado bien.

Tanjiro no fue capaz de ceder más tiempo el control, con un movimiento fluido y rítmico dio la vuelta dejando el pequeño y delicado cuerpo de Senjuro debajo del suyo.

Senjuro lo observo con sus grandes ojos claros color miel asustados y expectantes, pero sobre todo excitados y lujuriosos, esta sería la primera vez también de ir aún más allá de los límites establecidos que se habían dibujado.

Tanjiro observo su lechosa piel de porcelana, tan suave y sedosa, el rubor en su pecho y mejillas eran tan adorables como el propio omega, lo incitaba a corromperlo de la peor manera y mucho más por esa mirada inocente que lo observaba con tanto anhelo.

Tanjiro acaricio el largo de su cuello, la suave línea hacia su hombro, su clavícula, su pecho, hacia un pezón, luego el otro, su estómago y su ombligo, el nacimiento de su vello púbico y gratamente se sorprendía de lo maravilloso que era Senjuro, tan perfecto, la exquisita curva de su cintura, las prominentes caderas y por supuesto su linda pequeña polla omega, rosada y apretada de lo dura que estaba.