Emma estaba entrando a la sala común de Slytherin.
En uno de los sofas estaba Astoria, viendo el fuego de la chimenea, junto a ella estaba Pansy.
—Hola.— dijo Astoria, sonaba un poco insegura, Pansy no decía nada, parecía pensar en algo.
—...Hola, ¿Por qué están así?— pregunto Emma acercándose.
—Es que...— Astoria no termino de hablar, pues Pansy la interrumpio.
—Blaise vino a la sala común, y le dijo a Theodore que lo siguiera.
Cuando le pregunto que para que, Blaise le respondió que iban a ver lo que hacías.— dijo Pansy.
—Theodore se negó, ya que decía que eso era espiarte. Pero Blaise lo convenció.— continúo Astoria.
Emma sintió nervios, no le preocupaba que descubrieran que estuvo con Hermione.
Le preocupaba que Theodore se molestará con ella.
—¿Y que le dijo para convencerlo..?
—Dijo que estabas con la sangre sucia de Granger. Pero eso no es verdad, ¿Cierto?— pregunto Pansy, convencida de que Blaise mentía.
Emma no contesto, Astoria ya sabía que era verdad. No le molestaba, pero la razón por la cual estaba insegura es que no quería que sus amigos discutieran.
Pansy esperaba la respuesta de Emma, impaciente.
—¿Cierto?— volvió a repetir Pansy.
—No veo el problema...— dijo Emma.
Pansy se sorprendió, eso confirmaba lo que Blaise les dijo.
—¿No ves el problema? Emma,
Te apellidas Rosier,y Black.
Ambas familias son de las más respetadas por su linaje de sangre, también son conocidas por ser Mortifagos, que detestan a los sangre sucia.
Tu madre los detestaba, al igual que tú padre. Se supone que eres la heredera de ambas familias.— dijo Pansy, sabiendo que sería un problema si Emma "traicionara" a los sangre pura.
—Bueno, no es cómo que tenga varios familiares vivos que me pudieran juzgar.— dijo Emma, nerviosa.
—Sabes que los tienes, y están en Azkaban. ¿Qué crees que quisieran hacerte si llegarán a escapar? no están ahí por crimenes pequeños.— dijo Pansy, haciendo dudar a Emma.
Emma sabía que Pansy tenía razón, sus familiares estaban locos.
Y ella sabía que tal vez algún día lograrán escapar. Sirius logro escapar, ¿Qué aseguraba que los demás no?
—Bueno...— Emma intentaba excusarse, pero justamente entraron Blaise y Theodore.
Emma vio que Blaise estaba serio, el le daba igual, ella solo quería saber lo que diría Theodore.
—Te lo advertí, Te dije que no hablaras más con Granger.
¿Sabes que eso es un problema, no?
¿Acaso quieres ser juzgada por los demás sangre pura? ¡Piensa en tus apellidos!— dijo Theodore molesto, pero en realidad solo estaba preocupado por las consecuencias que podría traer las acciones de Emma.
—Pero solo hablé con ella un rato,
¡ni siquiera somos amigas!— Intento aclarar Emma, pero recordó que momentos antes de quedar atrapadas había visto a Blaise en esos pasillos, justo por eso quiso que entrarán a ese cuarto. Pero que casualidad que Blaise pasaba por ahí, y después ya no podía abrir la puerta. Y además, Blaise había ido por Theodore para espiarla.
¿Cómo sabía Blaise en donde estaban?
Después de unos segundos Emma unió puntos, y miro a Blaise con molestia.
—¡Fuiste tu! ¿No es así?
¡Que casualidad que sabías en donde nos quedamos encerradas Granger y yo! Porque tú fuiste quien le puso seguro a la puerta.— reclamo Emma acercándose a Blaise, con ganas de golpearlo.
Blaise ni siquiera se esforzó para mentir.
—Si, fui yo. No entiendo tu molestia, Black. ¡Además fue para demostrar que estás tomando decisiones perjudiciales!— dijo Blaise, intentando excusarse.
Astoria no sabía que hacer y Pansy no sabía cómo tomar la situación.
—¡Deja de llamarme Black, tu no puedes llamarme Black.
Solo me pueden llamar Black personas que me agradan!
¡Y también que te importa! Es mi vida,
No la tuya. Es mi elección si tomo malas decisiones.
Tu solo querías ponerlos en mi contra, admítelo.— dijo Emma bastante molesta.
—Eso no importa, ¡lo que importa son tus malas decisiones!— Theodore volvió a hablar.
—¡Se supone que eres mi amigo, solo tienes que hablar o pasar tiempo conmigo, No tienes que decidir lo que es bueno o malo para mí!— dijo Emma.
