Odio no dejar de pensarte ~ João Félix

Cap. 31

-Es que no se Fer- Solloze cruzando mis piernas para quedar frente a frente. -No sé porqué siempre me pasa lo mismo, ¿soy yo el problema?-

-¿Eres tonta? Como vas a pensar que eres tu el problema. Vic nos conocemos de hace medio año y en este poco tiempo me has demostrado más que la mitad de mis amistades anteriores. Eres una chica de diez, guapa, lista, graciosa, amable, cariñosa... Y te podría seguir diciendo miles de cosas más. Pero es obvio que ya lo sabes, eres la mejor amiga que he tenido y puedo llegar a tener. Y quien no sepa valorar tu amistad o otra cosa es tonto- Me abrazó Fermín para calmar mi llanto. -João es mi amigo pero te juro que ahora mismo lo odio. Y no se ni porqué lo ha hecho, el realmente te ama. O eso creí, siempre me habla de ti, de tu sonrisa, tu voz, tus ojos, tu personalidad...-

-Shh, no sólo me refiero a el en cuanto a fallar. Sino a todas mis últimas parejas, todas, y cuando digo todas es todas, me han puesto los cuernos. Ya sea por x o por y, pero lo han hecho. Y estoy empezando a pensar que soy yo el fallo- Escondí mi cabeza en su pecho intentando controlar mi respiración.

*Flash back*

-¿Lucas?- Miré paralizada a mi novio. -Con mi puta mejor amiga, ¿enserio?- Era la escena más desagradable que había visto nunca, y eso que ya me habían pasado cosas similares. Pero nunca con ella, Jessica, mi mejor amiga desde los 5 años. La conocí en la primaria y desde allí habíamos sido inseparables. Compartíamos todo, ropa, juguetes, maquillaje y parece que hasta el novio.

-Mierda, esto no es lo que parece Victoria- Se intentó justificar Lucas.

-¿No? Mi cabeza se está imaginando a mi novio y mi mejor amiga en la cama desnudos ¿verdad?- Me crucé de brazos. Me propuse no llorar tras la ruptura con mi anetior pareja, también por infidelidad. -Tu crees que persigo coches aparcados o algo ¿no?-

-Vicky vamos y hablamos- Me rogó empezando a vestirse.

-Primero, tu no me llamas Vicky porqué no eres el. Segundo, contigo no tengo nada que hablar. Y tercero, no quiero saber nada más de ti. No me llames, no me escribas, si me ves por la calle no me hables. Como si nunca nos hubiésemos conocido ¿entendes?-

Lucas solo asintió mirando al suelo, no tenía el valor suficiente para mirarme. Porque sabía que la había cagado y nada podía hacer para cambiarlo.

*Fin del flash back*

-Vaya capullo, tu no mereces que nadie te trate así- Me separó del abrazó para mirarme a los ojos y limpiar mis lágrimas. -Mientras yo esté aquí tendrás donde quedarte, ya sea a dormir o simplemente a pasar el rato. Puedes venir para lo que quieras que siempre estaré dispuesto a escucharte. Llora todo lo que haga falta porque aquí estaré para consolarte y servirte de pañuelo. Limpiando cada una de tus lágrimas y sanando cada una de tus heridas internas-

-Te quiero Fer- Volví a caer en llanto, pero esta vez por las preciosas palabras que acababa de dedicarme mi mejor amigo.

-Yo también Vic, eres lo mejor que me ha dado el mundo- Y nos volvimos a fundir en un cálido abrazo. Abrazo que duró varios minutos.

Era la primera vez después de mucho tiempo que me sentía a salvo con otra persona que no fuese o João o alguno de mis padres. Y era una sensación maravillosa ya que sabía que el no me haría daño. No como otras personas que con una simple idiotez que se le cruza por la cabeza ya la caga. Personas impulsivas que hacen las cosas sin pensar las consecuencias y después encima pretenden ocultarlas. Gente inmadura que si nos pusiésemos a contar neuronas nos sobrarían dedos de una mano.

-¿Tienes hambre?- Me preguntó sacándome de mis pensamientos.

-No mucha, esto me la ha quitado la verdad- Agaché la cabeza intentando retener las lágrimas que volvían a amenazar con salir.