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—Estate quieto o el delineado te va a quedar feo —Miriam se quejó mientras intentaba maquillar a Rowan, Cassie estaba sosteniéndole la cabeza, para evitar que se moviera

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—Estate quieto o el delineado te va a quedar feo —Miriam se quejó mientras intentaba maquillar a Rowan, Cassie estaba sosteniéndole la cabeza, para evitar que se moviera.

—Ni puedo creer que te estén llorando los ojos, no seas débil —Cassie se reía recargándose en la espalda de Rowan para hablar cerca de su oído. Ollie los encontró así mientras se dirigía a la salida, tomado de la mano de Kenneth. Los chicos tenían la puerta abierta, por lo que quedaron expuestos a la mirada ajena. Rowan se sonrojó, y comenzó a negar con la cabeza, tenía un ojo muy delineado, base para maquillaje y las chicas estaban en medio del trabajo en el otro ojo.

Él era el hermano mayor de Kenneth y por lo regular se comportaba como una persona muy digna, tenía una forma de ser bastante tranquila que contrastaba con la enérgica Miriam, la hermana pequeña o Kenneth el rebelde, el hermano de en medio.

—No es lo que ustedes creen —espetó, avergonzado al verse descubierto. Kenneth soltó una carcajada y sacó su destartalado celular para tomarle una foto, impotente Rowan intentó cubrirse, pero fue demasiado tarde.

—No sabía que tenías gustos tan peculiares, pero no te preocupes, yo respeto —Kenenth se mofó en la cara de su hermano mayor, quien lo miró mortificado.

—Mira quién viene a hablar ¿Crees que esto es más raro que lo tuyo? —dijo, refiriéndose a su evidente homosexualidad. Ollie se sonrojó al escuchar esas palabras, sabía que aquellos hermanos podían ser rudos entre ellos, pero fue una sorpresa cuando se dio cuenta que la mitad de las veces lo usaron como un arma en medio de sus intercambios de palabras.

—Por supuesto que sí, lo mío es la orientación sexual, la tuya es vocación de payaso —espetó, riéndose con más fuerza. Rowan se puso como un tomate, era demasiado remilgado para contestarle algo peor a su hermano pequeño.

—¡Kenneth tienes que unirte a nosotros! —Cassie se levantó, tomando al chico del brazo para tirar de él dentro de la habitación, luego se inclinó, echando un vistazo a Ollie—. Tú también puedes venir, necesito ayuda para superar mi curso de maquillaje editorial —exclamó orgullosa, llevaba mucho tiempo rogándole a su madre para que la dejara asistir a las clases, pero a pesar de la vivacidad de Cassie, sus padres eran estirados y aburridos, la única forma de que le dieran permiso fue cuando dijo que acompañaría a Miriam a los mismos.

Cassie era una muchachita con curvas, aunque era delgada se le notaba rolliza al lado de Miriam, quien parecía un palillo, alta y delgada. Tenía una sonrisa con los colmillos torcidos, el pelo castaño claro, los ojos azules, la cara ovalada y la nariz ancha. Era bonita, pero constantemente la molestaban por ser la novia de Rowan, quien heredó la impecable genética de su familia, aun así, tenía algo cautivador en la forma en la que sonreía, ninguno de los hermanos se podía resistir a esa sonrisa.

—Bueno...—Kenneth se lo pensó, pero luego le dirigió una mirada a Ollie—. Pues es que tenemos planes —Debido a su debilidad frente a Cassie, Oliver se sentía especialmente halagado cada vez que le negaba algo para pasar tiempo con él.

El bebé del jefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora