who are you in the dark? ✦ jimsu

Capítulo 31

En una sala de hospital, YoonGi se encontraba muerto de los nervios. La sala era fría, y olía a medicamentos, a cloro, a dolor y sufrimiento. El peor lugar donde podría estar era sin duda un hospital.

Luego estaba JiMin junto a él, abrazándolo y dándole todo el apoyo que necesitaba en esos momentos.

—Esta operación saldrá muy exitosa, mi amor. Yo sé que será así —JiMin acarició su cabello y le depositó un beso en la cabeza, mientras YoonGi se recostaba en su pecho, aún ansioso por lo que pasaría con su madre.

—Tengo miedo... —sin evitarlo, se aferró más a él con su voz baja y melancólica.

JiMin tragó grueso al verlo en ese estado. Él tenía muchos desacuerdos con su madre, incluso se peleaban y se decían hasta las cosas más hirientes. Pero definitivamente sería demasiado duro pasar por una situación similar a la de YoonGi, después de todo, amaba a su madre por más incomprensible que fuese.

—Todo pasará pronto, y vas a ver que madre Chae se recuperará existosamente —le dice, besando lentamente sus labios.

No estaban solos en la sala de espera. El señor Min había llegado junto a su esposa una vez que el hospital los había llamado para proceder con la cirugía. Min Dohyun quiso preguntar de inmediato quién había pagado por ella, o cómo había pasado. Sin embargo, una vez que llegó al hospital y lo primero que vio fue a YoonGi de la mano junto a Park JiMin, una sospecha se le vino a la mente.

¿Quién más iba a pagar por esa cirugía si no era el empresario millonario que salía con su hijo?

A pesar de haber aceptado a JiMin, aún no se le hacía la idea de verlo en escenas cariñosas con su hijo, por eso cada vez que YoonGi se recostaba en su hombro, se tomaban de la mano, o JiMin lo acercaba a su cuerpo con una mano en su cintura, Dohyun prefería voltear el rostro y no presenciarlo.

—Se que mamá estará bien, solo que aún el doctor no sale con los resultados de los exámenes previos a la operación. Deseo que todo salga muy bien...

—Y así será —el pelinegro lo reconfortó, pasando un brazo alrededor de su hombro y apretándolo contra él.

Esta vez el señor Min aclaró su garganta y se cruzó de brazos, recostado sobre aquella pared blanca.

—Ustedes... podrían solo... —Dohyun se mostró esta vez algo incómodo cuando notó que ambos estaban a punto de besarse nuevamente—, si permití su relación no significa que la digiera todavía. Solo... guarden sus momentos para cuando estén a solas.

YoonGi tosió incómodo y comprendió al instante a lo que se su padre se refería, por lo que no le quedó de otra que apartarse de JiMin por respeto. En realidad era bastante increíble y bueno que ya Dohyun haya aceptado su relación con otro hombre, así que era justo no montarle una escena como esas. No por ahora que no estaba acostumbrado.

—Sí, papá —obedeció.

Dohyun suspiró y se dirigió a JiMin esta vez.

—Y usted, joven Park...

El pelinegro tragó grueso al escuchar su nombre, pensando que quizá había metido la pata o le daría un sermón delante de YoonGi y en aquella sala de hospital por la confianza y roces que tenía con él.

Aun así no se dejó intimidar y respondió educadamente.

—¿Sí, señor Min?

—Yo le agradezco de todo corazón la gran caridad que ha hecho por mi familia, quizá no sea la palabra correcta para expresar mi gratitud pero lo que hizo por mi familia, por mi esposa, es algo que nunca olvidaré, el que haya salvado a la mujer de mi vida a cambio de nada es una gran deuda que le deberé toda la vida. Y no hablo de dinero, sino de espíritu. Realmente no tendré las vidas suficientes para terminar de agradecerle... muchas gracias.