YA NO DUELES* 2da parte de "DUELES TAN BIEN" TN X MIN YOONGI

Capítulo 21.

Agarré mi celular y pedí un carro, no quería esperar, pero el bus que necesitaba llegaba en una hora, entonces en el otro lado de la calle me recosté en una pared mirando el celular ignorando mis pensamientos que decían que me estaban criticando, levanté la cabeza y la mirada que sentí fue muy fuerte, tal vez una mirada herida que me hizo sentir pequeña.

Me vi obligada a sostenerle la mirada por un rato, hasta que uno de los que estaban con ella le habló, el auto no llegaba y comencé a desesperarme. Deben pensar que soy engreída, y que me creo mejor que ellos, deben creer que soy una cobarde y que les dejé de hablar porque quise. Si soy una cobarde, pero, yo enserio quería conservar la amistad, pero algo dentro de mi creía que era mejor que me alejara.

Sentí mucha presión sobre mí en esos momentos, estaba impotente no podía luchar contra la crítica que era algo que me ahogaba mucho. Vi el carro llegar a lo lejos y me apresuré a subir a él me dejo en la portería de la unidad donde vive mi prima, pero no quise entrar por el momento, me quedé en la calle por un tiempo.

¿Qué se supone que haré ahora?

¿Por lo menos estoy agarrando rumbo?

Caminé mientras me hacía preguntas y sobre pensaba no quería entrar a la casa todavía, tarde o temprano me tenía que cansar de caminar por todo el barrio así que me senté en un banco, en el banco me puse a repasar algunos detalles de mi infancia y me di cuenta de que tal vez mi primer amor no había sido Min Yoongi, mi primer amor había sido uno de los dos chicos que acompañaban a mi ex mejor amiga. Mierda y más mierda, ¿cómo podía haber olvidado al chico por el cual me revelé contra mi familia?

A mi ex mejor amiga la conocí cuando apenas teníamos 13 años y a los otros dos cuando teníamos 14 en 9no grado, en ese año hubo tantos detalles que no he mencionado hasta ahora, recuerdo haberlos incluido conmigo y con Valery, pronto nos volvimos un cuarteto inseparable. Resulta que en 8vo grado me cambiaron de colegio y también a las 2 rubias igual seguimos en contacto durante todo el tiempo que estuve en ese otro colegio.

Es gracioso por que los dos chicos tenían el mismo nombre "Samuel" que recuerdos...

Los diferenciábamos por su apellido, Mejía y Monsalve, El último durante mis años de adolescencia me gustó llamarlo mío y yo como suya, fuimos pareja por un periodo de tiempo, la historia fue gracioso.

Mejía, era alto de piel morena oscura sin llegar a ser negro, aún así le decíamos el negro "señor de la noche, oscuridad" ese tipo de apodos, era el mayor, aunque todos tuviéramos la misma edad, era delgado e hiperactivo también un tanto orgulloso.

Valery mi misma estatura un poco más trigueña y de cabello largo y lacio, como siempre era la bonita de las dos, un cuerpo de infarto y mi luz durante todo ese tiempo, voluminosa y hermosa, siempre estuve a su sombra, pero nunca llegó a molestarme ni a incomodarme, estaba más que acostumbrado.

Monsalve aunque prefiero llamarlo Samuel, era la pesadilla de los profesores, indisciplinado, detestaba el estudio, el terror de las mujeres ya que era bien mujeriego y perro, alto delgado pero no tanto, feo de cara aunque yo desde que lo conocí el rostro varonil me pareció precioso y tierno en un primer momento.

Todo empezó en Junio de ese año, un fin de semana tuvo relaciones sexuales con su mejor amiga, como era de costumbre nos lo contó a Valery y a mí que éramos demasiado cercanas a él, el miércoles de esa semana me confesó que yo le gustaba, a mí ya me gustaba desde hace ya tiempo, y como siempre no me lo creí, creí que mentía, que estaba bromeando y después de lo que nos contó sobre su mejor amiga y el me asusté y lo rechacé, hasta el día de hoy no se si fue lo mejor que pude hacer, aunque en un inicio dije que si y después que no, tenía miedo de lo que pudiera suceder, simplemente escapé, lo destrocé, pero solo yo sé cuan destrozada estaba yo, todo el mundo me echó la culpa de haberlo roto, pero quien se disculpó conmigo cuando me lo hicieron a mí, nadie supo todo lo que lloré y me recriminé por haber rechazado a mi primer amor.