Seventeen: Avatar The Airbender

Capítulo 14: Descubriendo el Camino del Agua

El sol se filtraba a través de las ventanas de la sala de entrenamiento, iluminando el espacio con una luz cálida y reconfortante. Dino se encontraba frente a Woozi, listo para comenzar su entrenamiento en el control del agua. El maestro agua, con su mirada seria y decidida, comenzó a hablar.

"El agua está en todas partes", dijo Woozi, su voz resonando en la habitación. "A veces no es tan evidente, pero está presente en casi todo lo que nos rodea. En nuestros cuerpos, en los líquidos que recorren nuestras venas, en el aire que respiramos, en las plantas y animales. Para dominar el agua, primero debes aprender a sentir su presencia en el mundo que te rodea."

Dino asintió, absorbiendo cada palabra con atención. Era un concepto fascinante, darse cuenta de la omnipresencia del agua en el mundo natural. Sin embargo, antes de poder avanzar en su entrenamiento, Jihoon intervino, con su mirada crítica centrada en Dino.

"Estás demasiado delgado", comentó Jihoon, evaluando el físico del joven avatar. "Necesitas desarrollar músculos si quieres tener éxito en tu entrenamiento. Debes comenzar a comer mejor, algo con proteínas."

Dino frunció el ceño, confundido por la sugerencia de su maestro. "Pero los monjes son vegetarianos", respondió, recordando la dieta que se seguía en el templo del aire.

Jihoon asintió, con una sonrisa irónica. "Eso explica mucho sobre Jeonghan, es delgado y delicado", comentó, mirando hacia el monje aire que estaba a cierta distancia, realizando sus propios ejercicios. "Y sobre Hoshi también, a pesar de tener buen cuerpo es compacto", agregó, señalando al maestro aire del oeste, que estaba concentrado en su rutina de entrenamiento.

Decidiendo ignorar los comentarios sobre su complexión, Dino se centró en la tarea que tenía por delante. Con determinación, comenzó su entrenamiento, que resultó ser una sesión intensa de ejercicio físico. A medida que levantaba pesas y realizaba flexiones, Dino se recordaba a sí mismo que cada esfuerzo lo acercaba un paso más a su objetivo de dominar los elementos y cumplir con su destino como avatar.

...

El bullicio llenaba la sala de comedor mientras los chicos se reunían para disfrutar de su merecido descanso después de una intensa sesión de entrenamiento. Dino, exhausto por el ejercicio físico, se encontraba sentado frente a su plato de comida, pero sus brazos se sentían pesados y cansados, incapaces de levantar los palillos para tomar un bocado.

En ese momento, Jeonghan apareció junto a él, con una sonrisa amable en el rostro. Extendió sus propios palillos hacia el plato de Dino y le ofreció un bocado de comida. El pequeño avatar aceptó con gratitud, tomando la comida con gusto.

"¿Cómo ha ido tu entrenamiento hoy?", preguntó Jeonghan, con interés genuino en la respuesta del joven.Dino suspiró, dejando los palillos a un lado por un momento. 

"Woozi es un monstruo", respondió con sinceridad. "Peor que Hoshi. Me hace hacer ejercicio, ya sea que me equivoque o no. ¡Incluso me dijo que estaba delgado!"Jeonghan soltó una risa suave ante la indignación de Dino. 

"No me sorprende", comentó. "Jihoon se formó en el ejército, así que está acostumbrado a ese tipo de entrenamiento riguroso. Además, eres apenas un niño, aún te queda mucho por crecer y desarrollar músculos." Dino asintió, reconociendo la lógica en las palabras de Jeonghan. 

"Sí, es verdad", admitió. "Aunque Jihoon también dijo que eras delgado y delicado, también dijo que Hoshi tiene buen cuerpo, aunque para él también es delgado", agregó rápidamente, recordando la conversación anterior.

Jeonghan arqueó una ceja, sorprendido por el comentario, pero luego sonrió con complicidad. 

"Supongo que Woozi tiene sus propias opiniones sobre la apariencia física", dijo con un toque de diversión en su voz. "Parece que te estás llevando bien con tu maestro agua", observó, cambiando de tema.

Dino asintió, notando la ironía en las palabras de Jeonghan. "Sí, y parece que tú y Woozi también se están llevando bien si sabías que había estado en el ejército", respondió con una sonrisa traviesa.

Jeonghan simplemente sonrió ante el comentario del joven, antes de ofrecerle más comida a Dino, asegurándose de que el pequeño avatar estuviera bien alimentado y cuidado.

...

La sala de entrenamiento estaba tranquila mientras Dino y Woozi se preparaban para otra sesión intensa. Dino observaba con atención a su maestro, listo para seguir sus instrucciones. Jihoon, mientras tanto, se encontraba cerca, revisando algunos pergaminos y preparándose para ayudar en el entrenamiento. Observó a Dino con interés antes de dirigirse a él.

"Dino, ¿alguna vez has visto un pergamino de posturas de las tribus del agua?", preguntó Jihoon, buscando una forma de mejorar el entrenamiento del joven.

Dino frunció el ceño, negando con la cabeza. "No, nunca he tenido la oportunidad", respondió sinceramente.

Sin perder tiempo, Jihoon colocó un pergamino en una pared cercana, desenrollándolo para que Dino pudiera verlo claramente. En él se mostraban las posturas y movimientos básicos del agua control. 

"Quiero que domines esto antes de empezar a ver otras formas más complicadas", explicó Jihoon, señalando el pergamino con seriedad.

Dino asintió emocionado, absorbiendo cada detalle con atención. Luego, con una chispa de curiosidad en sus ojos, se volvió hacia Woozi. "¿Así entrenabas en el ejército?", preguntó, recordando la conversación anterior con Jeonghan.

Jihoon arqueó una ceja, sorprendido por la pregunta. "¿Jeonghan te dijo eso?", preguntó con incredulidad. Dino asintió con una sonrisa traviesa. 

"Entre nosotros no hay secretos", dijo con confianza.

Woozi asintió con una leve sonrisa. "Sí, así entrenaba", confirmó. "Pero en comparación con tu entrenamiento y el mío, yo estoy siendo bastante bueno, mis entrenadores, generales y sargentos no eran amables", añadió con sinceridad.

Dino realizaba cada postura, poniendo especial atención en su cuerpo, logrando un control increíble en él, Jihoon impresionado lo felicito. Dino se sintió halagado por el elogio de su maestro. Siguió a practicando las poses y movimientos del pergamino, sintiéndose cada vez más cómodo con ellos. Woozi lo observaba con atención, impresionado por la facilidad con la que se conectaba con su cuerpo.

En un momento de silencio, Dino soltó una observación inesperada. "Jihoon debería continuar siendo bueno", dijo de repente, mirando al mayor con una sonrisa pícara. "Especialmente con mis maestros", añadió, dejando a Jihoon desconcertado por la declaración.

¡Hola! Es mi primera nota. Primero, gracias por leer, me gustaría que comentarán y me dijeran que les parece la historia.

Segundo, tengo la impresión de que los monjes del templo del aire serían más abiertos con aspectos sobre las relaciones, aunque no es el punto principal de la historia. Disfruten, les tqm.