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<<El plan "espantar a los muertos">> (Continuación)

Con un entusiasmo renovado y una buena dosis de humor, nos sumergimos en la elaboración del "plan espantar a los muertos", dispuestos a enfrentar lo desconocido con valentía y compañerismo. Nuestra estrategia iba desde lo práctico hasta lo absurdo, pero estábamos determinados a resolver el enigma que acechaba en las sombras de la noche.

Kart, siempre el estratega pragmático, propuso investigar más a fondo la historia de la casa en donde vivía, puesto que no se sabe si tuvo algún otro propietario antes de mis abuelos y buscar posibles explicaciones racionales para los fenómenos inexplicables que había presenciado. Si bien su enfoque era lógico y sensato, Mike insertaba comentarios extravagantes y Od contribuía con reflexiones hilarantes que arrancaban risas a cada paso, a y yo soy el locutor de tu programa favorito, <<encuentra en espíritu que perturba a Erik>>, si, prefiero tomarlo con gracia.

Decidimos dividirnos las tareas: Kart se encargaría de la investigación histórica, Mike propondría "rituales de cacería de fantasmas" dignos de una película de comedia de terror, y Od... Bueno, Od sería nuestro "consultor de siestas", siempre presente con ese aire relajado que contrastaba con la tensión del momento.

Mientras discutíamos los detalles de nuestro plan, un gato negro cruzó rápidamente la sala, desatando un grito inesperado de Mike y una carcajada de Od.
–¡¡Un gato negro!!, ¡¡Es el diablo, un espíritu inmundo, una alberración del infierno!!!!.

–Bueno si quieres llamarle infierno a la casa de tu vecina okey, y si, ¿ese fue seguramente el de los ruidos del tejado no crees?, ¡Es solo el gato de tu vecina por dios!- ya Kart parecía alterado de tanto irle a la contraria a un borracho.

–sigamos con el plan chicos.

Parecía que el universo conspiraba para mantenernos en vilo, pero en ese momento, una complicidad única unía a este grupo dispar de amigos dispuestos a desafiar lo sobrenatural.

Al finalizar nuestra reunión, con planes absurdos detallados, risas compartidas y una determinación renovada, me sentí agradecido por contar con amigos que, a pesar de sus excentricidades, estaban allí para enfrentar los desafíos junto a mí, y sobre todo, me creían. Claro yo no les voy a decir nada de esto porque o sino sus egos explotan.

Y así, armados con una combinación de razón, humor y compañerismo, nos preparamos para adentrarnos en la "oficina de registros" en la noche, listos para desentrañar el misterio que había alterado mi tranquilidad y descubrir la verdad que se escondía en las sombras de mis sueños.

íbamos a ir a la "Oficina de registros" porque según Google allí se encontraban todos los nombres de los antiguos propietarios de las casas antiguas en todo Norwalk.

Zec más tarde llamo y dijo que tenía que cuidar a su hermana menor todo el finde, así que no nos podría ayudar.

***
Más tarde ya estábamos apunto de salir, solamente estábamos esperando a que Mike terminara de darse un baño, ya se le pasó el efecto del alcohol por lo que se dió cuenta de que olía fatal.

Od y Kart fueron a arriba a preparar el equipamiento con lo que tenga Mike en el "pequeño" almacén de suministro que tiene.

–Listo, ya terminamos, Kart añadió demasiadas cosas de defensa personal a la mochila y apenas cupieron las linternas.

–¿Y Kart?

–ahora baja- ladeó los ojos- con otra maleta,¿A Mike le falta mucho?.

–Ya estoy aquí, llego su salvación.

Sip muy el definitivamente.

///
Ya estamos en el coche camino a la Oficina de registros, Mike se encaprichó en ponerse un pasamontañas fosforescente, así que el se quedará el el auto, porque sería muy obvio y sospechoso.

Kart además de ser el sobreprotector de la pandilla también era el más fuerte, kart posee un aire ruso muy evidente, su padre es ruso pero él vive con su madre aquí en Suecia, tiene el pelo más rubio que yo, al punto de que parece un sol, también tiene la piel muy pálida a pesar de que a intentado achicharrarse al sol con tal de broncearse, los ojos bien azules y espalda ancha con músculos bien formados. En otras palabras yo soy una alberracion comparada con el, apenas tengo abdomen marcado.

–hey musaraña ¿que esperas?, ¿A qué kart te lleve cargado?- Mike en serio a veces es un tanto pesado.

–¡ya voy!

Cogí la otra mochila preparada por Kart ya que Od estaba "demasiado" ocupado encendiendo su linterna.

///

Ya estamos en la entrada trasera, por suerte no hay guardias, es un lugar antiguo, ya que fue la primera oficina de registros de la ciudad .e incluso diría yo que se ve un poco tétrico todo por aquí, como si hubiera sido un lugar abandonado de la ciudad.

–Esto es un poco raro, ¿no te parece?, Parece como si no viviera nadie por aquí.

–Por primera vez concuerdo contigo Od, siento que en cualquier momento el gato negro me atacará y me comerá el cerebro.

–Mike deja a los gatos negros, chicos centrémonos en esto de una vez-nos estamos desviando.

Al final Mike insistió en venir y porsupuesto quitarse el pasamontañas fosforescente primero.

–Nos dividiremos, Kart y Od por un lado, y Mike y yo por el otro, no será en equipo, simplemente por zona, ¿okey?

–Amja...

Al entrar por la puerta trasera veo un lugar antiguo y abandonado con un toque casi melancolico, y hay me preguntó, ¿Que le sucedió a las personas de este lugar?, ¿porque todo se siente tan vacío?, Al lado derecho hay una puerta ya abierta, como indicio de que fue forzada, pero lo extraño es que todo adentró está intacto, esto al parecer fue una antigua oficina, en un lado está un viejo y polvoriento estante que tiene pinta de que no a sido tocado en años, por otro lado un escritorio vacío, a excepción en una cosa; una fotografía. Al acercarme y tomar la foto defino el rostro de un hombre bastante joven de aproximadamente 20 años, pelo castaño cara alargada y ojos grises, con esa inconfundible tristeza, no se veía feliz, estaba al lado de una chica con un vestido floreado, la cual no se le veía el rostro debido a las manchas del tiempo, le tomaba la mano. Por alguna razón esa fotografía me transmitió más melancolía de la que estaba en el ambiente, no parecía enojado con la chica, sino más bien afligido, con miedo. Al instante me vino a la mente el momento en que Ellen me dió a elegir, en el que me dió la espalda, ese miedo de perderla.

Aparto los pensamientos melancólicos y guardo la fotografía en la mochila. Revisó las gavetas del escritorio esperando encontrar algo más, pero no, está totalmente vacío.

Luego reviso el estante, me pasó por lo menos dos horas sin encontrar más nada que polvo y viejas transferencias de propiedad, en eso noto que algo se cae de encima del estante, un pedazo de papel doblado y desgastado , es una página arrancada de lo que parece ser un diario.