juntos

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No dije nada. Termine de las heridas y luego salí del maño cogiendo de la mano hasta su sofá, ya que no tenía idea de donde estaba su habitación. Se sentó en él y yo me quede de pie delante de él.

Me empecé a quitar el top que traía lentamente quedando en mis sostenes de encaje blanco. Me acerque hacia él y le susurre al oído.

- Si quieres ver más lo tendrás que quitar tu mismo, porque ahora sí que estamos en igualdad de condiciones precioso.

Él sonrió de manera picarona y me cogió de la cintura haciendo que me quedara sentada encima de él. Empezó a dejar un camino de besos por mi cuello haciendo que yo tirara mi cabeza hacia atrás.

Llego hasta mis labios y nos empezamos a devorar lentamente. Pero evidentemente empezó a subir la intensidad como la última vez.

Mientras nos besábamos note una mano que dejaba mi cintura y subía hasta donde estaba el cierre de mi sostén abriéndolo con habilidad liberando así mis pechos. Me tumbo haciendo que yo quedara debajo de él y empezó a seguir con su recorrido de besos hacia mi abdomen llegando al borde de mi pantalón.

Lo empezó a desabrochar y a quitar lentamente. Obviamente en ese momento se dio cuenta de mi larga cicatriz, pero no dijo nada al respeto. Continuo con su trabajo besando mis piernas hasta llegar al centro de ellas donde ya estaba mojado hacía rato.

Quito mi tanga lentamente y paso sus dedos por encima de mi clítoris haciendo que los primeros gemidos empezaran a salir de mí. Lamió lentamente haciendo que me retorciera y pidiera por más.

Se separó de mí y se empezó a quitar su pantalón, a lo que yo lo ayude a quitarse todo haciendo que por fin los dos quedáramos desnudo. Nuestros cuerpos se empezaron a rozar hasta que por fin él entró en mí y nuestros cuerpos empezaron a chocar aumentando la intensidad en cada momento.

- Oakley me voy a correr.
-Vamos muñequita, mente para mí.

Estas palabras fueron suficientes para que me corriera y momentos después se corriera él.
En el salón solo se escuchaban nuestras respiraciones agitadas intentando calmarse.

Se apoyó sobre mi cuerpo abrazándome y le acaricié su espalda que había dejado marcada con mis uñas por el placer que ese lindo me había provocado.

Central cee || Tócate tu mismaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora