Central cee || Tócate tu misma

Preocupacion

Algunos estaban limpiando la mesa y yo aproveché para salir al exterior, ha fumarme un cigarrillo. Salí y solté el humo de mis pulmones sintiendo una relajación en mi interior.
- ¿Era tuyo? - Pregunto una voz a mis espaldas. Vi que era Oakley el que preguntaba.
- ¿Si era mío el qué? - Pregunte sin entender la pregunta.
- La puta coca. - Escupió con enfado.
-Bueno, técnicamente no, yo solo la vendo. - Conteste sin más.
- Pero tu estás loca. Pensaba que solo vendías maría y chocolate. ¿Sabes quantos
años te puedes caer por esta mierda?
- Así que por esto estás enfadado. - Reí yo, pero noté como él no se reía.

- No estoy jodiendo Nina. Te llegan a pillar el otro día y ...
-Pero no me pillaron. - Lo corté yo un poco molesta.
-Porque yo te salve el culo. - Me respondió. Aquí tenía razón.
-Oye a mí tampoco me gusta, pero tengo que hacerlo vale? Así que me da igual lo que pienses. - Dije dándole una calada rápida a mi cigarro.

Él se acercó a mí, quedándose sentado a mi lado. Note como agarraba mi linda carita y la giraba haciendo que quedáramos frente a frente.

-¿Qué te ha pasado Nina? Tienes la cara echa mierda. - Pregunto con preocupación
-Es del otro día que me caí. - Dije girando mi cara para no verle a los ojos.
-No me mientas muñeca. - Dijo sin dejar de mirarme. Suspire con cansancio.
-Cosas mías Oakley no te preocupes vale? - Dije tratando de sonar convincente.
-Joder Nina, eres una puta caja de secretos. Vendes coca, llegas con la cara destrozada. deiaste de correr por algo que aún no sé.. - Y tenía razón muchas cosas pasaban, pero como se había convertido en mi vida ya ni siquiera me cuenta.

de lo grabes que estaban las cosas. De lo jodida que estaba mi vida. Y de lo rota que estaba yo.
Me limite a sonreír e intente levantarme para irme, pero él me frenó.

- Esto no va a quedar así Nina. - Me dijo para después depositarme un suave beso en la cornisa de mis labios y acto seguido irse.

Hacía mucho tiempo que alguien no preguntaba por mi vida. Ni se preocupaba por mí. Ni tenía interés en que había más allá que la Nina que siempre mostraba frente a los otros.