CAPITULO 32: La vida de Brayan

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Veo el rostro de Henry parecía que estaba procesando la nueva información, no se le había contado si la clave al final había funcionado pero no es como si hubiera insistido además ya Edward le había contado una parte pero no sabía la parte de la enfermera a la que íbamos a ver en ese momento

— ¿Tu tía está viva e intento matar a tu primo?

—Aun pienso que puede ser un error aunque Carlos dijo que era ella—estaba nerviosa cada vez que nos acercamos al lugar donde ella estaba—sé que es muy extraños y me vas juzgar porque no le dije a Edward pero…

—Comprendo porque no lo hiciste, se le ha notado muy cansado últimamente, creo que ha sido mucho entre el trabajo y la universidad, April no lo puede cubrir todo el tiempo por lo que se—lo veo sonreírme y abrazarme de los hombres—Estoy tan orgulloso de los cambios que ha tenido desde que llegue a aquí

—Fue gracias a ti y a Emma que considere ser amiga de esos idiotas

—A los cuales quieres pero ¿Qué te preocupa tanto con Edward? —no creo que esa sea un buen tema cuando estaba tan nerviosa porque ya habíamos llegado

—La pregunta sería que no me preocupa pero es un tema que no quiero tener en estos momentos—veo a Carlos que nos observa— ¿Seguro que es ella?

—Aun no la veo solo me informaron que es la mujer de la foto que buscaban

— ¿Cómo lograste dar con ella? —observo como se baja del auto para abrirme la puerta y bajo junto a Henry

—Su plan fue un rotundo éxito—lo sigo algo nerviosa pero Henry me toma del hombro para intentar calmarme

—Estoy aquí para cualquier cosa Esmeralda, si quieres Carlos y yo pasamos a comprobar, la vi un par de veces en unas fotos—era la mejor opción en mi estado actual no podía reaccionar con tranquilidad, podía terminar en crisis otra vez

—Es lo mejor, solo denme unos minutos—ambos asiente, estábamos en una casa un poco lejos de la ciudad, muy bonita en mi parecer ¿Era de mi familia? Ahora nos encontrábamos frente a la puerta y veo como la abre para entrar los tres mostrándome una pequeña sala ordenada— ¿De quién es esta casa?

—Es mía Señorita, no quería que la llevaran a la mansión, por ahora es mejor no levantar muchas sospechas, su primo está avanzando muy bien, esta mañana me informaron que logro pronunciar algo, intendible pero es un avance—el solo recordar todas las cosas que me hacia Brayan me hace dudar si debería o no aceptar la propuesta de Edward pero tenía tanto miedo de que podía salir, si algo salía fuera lo planeado no sabría que hacer ¿Por qué tenía que tener tanto miedo?

—Esmeralda ¿Estas bien? —Veo Henry que parecía preocupado—Puedo encargarme de esto con Carlos ¿Por qué no esperas afuera? —niego, no podía seguir siendo tan cobarde aunque el miedo me invadiera tenía que ser fuerte, muchas personas confían en que puedo

—Lo estaré—me siento en uno de los sofás tocándome la cabeza, mis mareos estaban volviendo, solo le daba por momentos

—Estas alterada, es lo que puedo ver—siento que me toma la mano para tomar mi pulso—Intenta calmarte no es normal que estés así y sudas, solo mira lo pálida que estas, no veras a esa mujer

—Lo hare Henry—lo veo—Llevo días así, es solo que todo lo que está pasando, necesito un respiro de mi vida—me cubro el rostro, intentado calmar mi respiración y aclarar la mente, me hace recordar cuando Edward era el encargado de mis terapias, forme mi lugar feliz en un autobús junto a él, solo que esta ocasión me lo imaginaba a todos, discutiendo por cualquier cosa y Edward a mi lado sonriéndome mientras tomaba mi mano, me concentro en el calor de su mano y sus ojos que me gustaba perderme en ellos

Los secretos del gorriónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora