El Amor Se Escribe Con Sangre [Kol Mikaelson & Tu] -En Pausa-

CAPITULO 3

Corría y corría. Escapaba de algo, o alguien. Me sentí aliviada cuando llegue a casa de Mike, mi futuro esposo, con quien estaba comprometida.

-¿Qué sucede, Victoria?- Preguntaba al verme agitada.

-Algo... algo me seguía- Decía agitada.

-Tranquila, no hay nada, estarás bien- Me abrazó.

Al sentir sus brazos, me sentí tan en paz, sin miedos. Pero de pronto sentí su cuerpo cayendo al suelo.

-¡MIKE!- Grite viendo como de su cuerpo salía sangre.

-Vete, vete lejos de aquí...- Susurraba a punto de cerrar sus ojos para siempre.

-No, Mike... ¿Qué te sucede? ¿Quién te hirió?- Preguntaba mientras de mis ojos salían saladas lágrimas.

De pronto, un miedo comenzó a subir por mi espalda, cerré mis ojos y abrase a Mike. Sentía su corazón latir cada vez más lento, hasta que ya no latió más. Comencé a sollozar, y luego algo corrió por mi cuello, sangre.

-¡AH!- Grité levantándome del suelo, y tomando mi cuello, algo me estaba pinchando éste, sentía dos agujas en la yugular.

Mike yacía muerto en el suelo, y al parecer también lo estaría yo. Pero ahí estaban las palabras nuevamente.

"Tranquila, estarás bien" Aquel acento inglés habló.

De pronto el sangrado comenzó a detenerse, trate de buscar a aquel hombre, pero había desaparecido sin dejar rastros, cuando la sangre corría por mi cuello, no podía girarme no podía moverme ni hacer nada.

Desperté.

Sentía mi cuello débil, lo toque y tenía sangre. Me levante corriendo al baño, y me vi al espejo, tenía un par de agujeros y sangre fresca alrededor. Mi miedo comenzó a aumentar, coloque una toalla para quitar la sangre, y me fui a mi habitación, no era demasiada pero el hecho de soñar que me sucedía eso, y despertar igual, me aterraba.

Al llegar a mi habitación, vi la ventana abierta. Otra vez el terror, agobiaba mi cuerpo. Cerré la ventana fuertemente, y cerré las cortinas también, me apoye sobre esta y trate de calmar mi respiración, algo me estaba sucediendo, algo malo... No sabía qué, pero tenía miedo.

Me quede todo el resto de la noche despierta, a penas comenzó a aclarar, me vestí con uno de mis vestidos y fui por Mike. Sabía que era temprano, pero aun así me abriría. Al llegar, llame a la puerta varias veces, sin obtener respuesta.

Me di la vuelta por detrás de la casa, salte unas yerbas y entre por una puerta secreta que tenía la casa.

Al entrar me lleve una mala imagen. Mike estaba en el suelo de su cocina, inconsciente. Su cuello estaba destrozado, tenía varias marcas en sus brazos. Comencé a gritar por ayuda, nadie me escucharía, lo tome como pude y salí con él a la calle, justo iba pasando un señor con una carreta. Intento ayudarnos, pero no podía hacer nada, ya estaba muerto y no había nada que pudiéramos hacer.

Corrí hacia el bosque, llorando, no quería vivir, no podía si no era al lado de mi amado Mike. Mis ojos estaban llenos de lágrimas, no veía nada, tropecé varias veces, la última hizo que cayera al lado de un tronco, me quede allí llorando. Mi pierna sangraba y mucho, tenía un gran corte, toque mi cabeza y al quitar mis manos tenía más sangre, otro corte más. Seguía llorando, de ahí nadie me sacaría.

No pasaron muchas horas, en las que quede completamente inconsciente.