Baby thoughts || Deathduo

¡★! twenty-one

Lágrimas corrían por las mejillas del omega mientras su cabeza descansaba sobre el pecho de su alfa mojando su camisa, el mayor no estaba muy diferente de el luchando por retener sus propias lágrimas, mirando la escena que se reproducía en el televisor.

–No, ahora va a morir– expresó Missa con tristeza, apuntando su dedo, en la escena se veía como la chica abrazaba al hombre, ambos de rodillas en el piso, mientras lloraba desconsoladamente.

Chayanne no entendía nada, porque su papi lloraba y su papá estaba a punto de hacerlo, quería llegar hasta ellos para darles un besito, de seguro eso los haría muy felices, dejarían de llorar y de prestarle más atención al televisor, lo tomarían en brazos y dormirian los tres juntos como debía ser, gateo dispuesto a llegar al sofá, sentándose en espera de que alguno se tomara la molestia de subirlo al mismo, pero a pesar de estar allí, mirando hacia arriba eso no ocurrió, la atención de ambos estaba totalmente centrada en el tonto televisor.

"¿a caso me están ignorando?"

Molesto, el mismo tomo cartas en el asunto, tomo la tela del pantalón de su papá, empuñando su manita tomo la fuerza necesaria para comenzar a levantarse, apoyándose también en el borde del asiento del sofá.

Philza al sentir la presión miró hacia abajo, sorprendiendose al encontrar a su cachorro de pie, apoyado en el sofá, mirándolo con su típica inocencia.

–¡Mira Missa!– exclamó con emoción el alfa hacia su omega que seguía con la cabeza sobre su pecho.

–Lo sé, lo sé, se está desvaneciendo–respondió este, sorbiendo su nariz ante la escena del dorama.

Philza en cambio tomo su mentón haciendo que lo mirara, ante tal acción Missa iba a reclamarle por hacer que se perdiera lo poco que quedaba del capítulo, pero su esposo lo hizo mirar a un costado de sus piernas, donde el bebé seguía de pie babeando su mano libre echa puño.

–¡Bebé!– casi gritó al verlo allí apoyado.

Chayanne se exalto ante el tono usado por su papá, haciendo que se desestabilizara y cayera sentado sobre su pañal, del susto hizo un puchero que en segundos comenzó a temblar transformándose en llanto.

"estúpida, me asustaste"

Philza fue rápido en inclinarse para tomar al bebé, sentándolo en sus piernas a la vez que lo mecía intentando calmar su rabieta.

–Aww bebé lo siento, papi se emociono mucho– dijo Missa, pasando sus dedos cerca de sus ojitos, limpiando sus lágrimas de cocodrilo.

"se que soy genial, pero más consideración hombre, sigo siendo un bebé, pude haber muerto"

–papá malo, papá malo– regaño Philza en broma a su esposo, con la intención de hacer reír a su pequeño cachorro.

–Ao, ao– imito Chayanne entre tiernas risas.

Ambos padres se miraron entre sí para luego estallar en risa por los regaños del pequeño, era un alivio escucharlo decir otra cosa, sentían que iban a volverse locos por escucharla decir "Doie" todo el día desde aquella vez que aprendió a decirlo.

Estaba aprendiendo tan rápido que daba algo de escalofrios que el tiempo pasara tan rápido, su bebé estaba creciendo y ellos eran unos padres orgullosos de que siendo tan pequeño fuera tan inteligente.

–¿Estás regañando a tu papá?– preguntó el omega intentando sonar intimidante ante su bebé, pero esta solo la veía y reía.

–Ao–lo señaló con su pequeño dedo esa vez Missa enternecido beso el dedito y seguidamente tomo al bebé de los brazos de Philza, para abrazarse a el y llenar su cabeza de besitos, deleitándose por el aroma a shampoo de bebé, acompañado de balbuceos inentendibles.

–Chay merece un premio ¿no crees? Ahora que ya puede ponerse de pie solito y aprende a hablar más rapido– dijo el alfa hacia su esposo.

"um, ahora si nos estamos entendiendo, ¿que tal un poco más de leche con chocolate? O de eso que te dice papi que no me des pero igual lo haces ¿como es que se llamaba?... ¡dulce!"

Missa asintió de acuerdo con su alfa.

–Tienes razón, este bebé precioso se ganó un delicioso...

"¡Pastel de chocolate!"

–¡Puré de Zanahoria!

La emoción en las caras de Philza y Chayanne desapareció y ambos formaron el mismo puchero totalmente decepcionados con la idea de premio que tenía Missa.

"nah, esa chingadera yo no la quiero"

Esa vez Chayanne se arrepintió de haber sido tan genial.