El Florecimiento De Un Jade - Penélope Featherington

Capítulo 5

Mientras que para Francesca, que hoy debuta en la sociedad, ha abrazado la idea del noviazgo y el matrimonio. Aunque Franny no fue seleccionada como el diamante de primera agua, para consternación de su madre, era obvio que de todas las nuevas debutantes de esta temporada, ella tiene el atractivo más dulce y prometedor. Incluso el Lord Chambelán quedó cautivado por la entrada de Franny hoy en el palacio de la Reina.

Al llegar, las damas Bridgerton tomaron sus tarjetas de baile de la mesa de la entrada y se las pusieron en las muñecas. Colin, de pie detrás de Eloise, escaneó las cartas en la mesa y notó que las cartas de Featherington todavía estaban colocadas allí.

— Bien — Pensó para sí mismo. Podría encontrar fácilmente a su amiga Penélope con solo mirar la entrada cuando serán anunciados por el Maestro de Ceremonias.

Mientras los Bridgerton se instalaban a un lado de la pared, varios jóvenes comenzaron a agruparse a su alrededor pidiendo un lugar en la tarjeta de baile de Franny. Sin embargo, con una mirada mortal del vizconde Bridgerton, sólo dos jóvenes pudieron acercarse con éxito al debutante por primera vez. Lady Cowper, junto con su hija Cressida, vinieron a unirse a los Bridgerton en el área. Violet y Anthony han elogiado lo hermoso que es el lugar, siendo simplemente corteses con el anfitrión de la fiesta.

— Bueno, me alegra mucho que hayas asistido a Lady Bridgerton. Escuché que tu tercera hija hizo su debut hoy en Su Majestad, ¿No es así?

Violet le dedicó una sonrisa falsa a Lady Cowper. A ella nunca le había gustado la dama. Desde el debut de Daphne supo lo terrible que es la personalidad de su hija, Cressida. Incluso Penélope, la mejor amiga de Eloise, a quien Violet tiene un corazón tierno, había sido víctima del constante acoso y humillación de Cressida.

— Ah, sí. Aquí Franny está ahora en el mercado matrimonial

Cressida Cowper mira a Francesca de la cabeza al suelo, analizando su apariencia completa para la noche. Francesca está años detrás de Cressida en edad, pero el mayor nivel de estatus y belleza de la primera son mucho más obvios en comparación con los de la segunda, que ahora está en su tercera temporada.

— Qué lástima, ella no es elegida como diamante — Cressida comenta sarcásticamente.

Esta declaración irritó internamente a Violet.

Puede que su hija no sea elegida como diamante, pero era evidente que de todas las nuevas debutantes, Franny tiene la cara más bonita y el prestigio familiar.

— Eso puede ser cierto, pero nuestra Francesca seguramente tiene las ventajas de ser el diamante. Es una pena que Su Majestad no estuviera de humor para elegir uno — Lady Bridgerton educadamente hace callar al joven Cowper. Como era cierto, de todas las debutantes presentadas hoy en palacio, la reina Carlota no ha nombrado a ninguna para el codiciado título de la temporada femenina. Podría haber echado un segundo vistazo a Francesca, pero hay algo que no es suficiente para satisfacer el interés de la Reina.

Sabiendo que ya no puede avergonzar a la hija de Bridgerton, Cressida dirigió su atención a Colin, que acababa de regresar a la alta sociedad.

— Señor Bridgerton, veo que ha regresado. ¿Ha disfrutado de sus viajes? — Cressida pregunta con una sonrisa maliciosa en su rostro.

A Colin nunca le había gustado hablar con Cressida porque a ella no le interesan los temas que le gustaría discutir. Pero siendo un caballero, de vez en cuando le concede un baile a la dama, apaciguando el pedido de su propia madre de socializar con diferentes damas solteras. Y sabía muy bien que esa noche lo obligarían a bailar con la dama rubia.

— Ah. Sí, de hecho. Italia es una joya — Dijo simplemente el tercer Bridgerton, sin querer profundizar más la conversación. Justo antes de que Cressida tuviera la oportunidad de invitarlo a bailar, un anuncio desde la entrada llamó la atención de todos.
— Lady Featherington junto con su hija, la señorita Featherington — Anunció el Maestro de Ceremonias.

Antes, había un poco de alboroto cada vez que los Featherington llegaban a cualquier baile al que asistían. Pero ese no fue el caso esa noche. Después de todo el espectáculo causado por su primo fraudulento Jack Featherington la temporada pasada, y el compromiso falso de Marina Thompson con Colin Bridgerton de la temporada anterior, Portia y sus hijas parecen atraer los murmullos y las miradas críticas de los miembros de la alta sociedad.

Afortunadamente, en el buen sentido, la noticia de que Penélope recibió una herencia considerable de su pariente pone a su familia en un tono más alegre. Con él, los Featherington pudieron devolver todo el dinero de inversión que Jack había tomado de los miembros de la alta sociedad y pagaron todas sus deudas. Se podía decir con seguridad que la herencia de Penélope les permitió hacer borrón y cuenta nueva.

— Ah. ¡Lady Featherington! Qué bueno ver que estás de nuevo junto a Prudence — Lady Cowper saluda a la baronesa viuda. A pesar de que sus hijas no se llevan en los mejores términos, Lady Featherington y Lady Cowper comparten una buena cantidad de horas de té juntas, compartiendo todos los chismes de la ciudad.

Prudence saluda a las nobles madres y a Colin Bridgerton, que acaban de ser salvados por la noche de las malvadas garras de Cressida Cowper.

— Buenas noches, Lady Cowper, Lady Bridgerton, señor Bridgerton — Hace una leve reverencia que fue devuelta por todos aquellos a quienes saludó.
— Buenas noches, señorita Featherington. Parece que no veo a su hermana con usted
— Bueno, Philippa ya está casada, señor Bridgerton. Ella y el señor Finch actualmente están extendiendo su luna de miel — Dijo la hija mayor de Featherington.
— No, me refiero a Penélope — Había una leve señal de molestia en el rostro de Colin mientras busca a la otra señorita Featherington.

Sólo hay dos razones por las que vino a unirse a su familia para asistir a este baile a pesar de su cansancio por el viaje de regreso a casa. Y eso fue para apoyar el debut de Francesca y segundo, ver a su buena amiga Penélope. Tenía muchas ganas de preguntarle cómo está y saber la respuesta a su pregunta de por qué no le ha enviado ninguna respuesta de todas sus cartas.

Esta visión no escapó fácilmente a los ojos de Violet Bridgerton. Notó la ligera incomodidad en el tono de su hijo mientras buscaba a su pelirroja favorita. Al escuchar de su mayordomo cómo Colin preguntó por su vecino cuando lo dejaron solo por la tarde, la matriarca Bridgerton supo que tenía que estar pasando algo ya que Penélope no había dado ninguna respuesta a las cartas de Colin.