Jade

SOY UNA REBELDE

-Hola Gabi, ¿Vamos a la habitación?

-Claro.

-¿Puedes subirme la mochila?- Puse mis mejores ojos de cachorrito.

-Vale...

-Así que ¿Tu cuidas a la nueva Rebelde?

-¡¿Cómo a la nueva Rebelde?!

-Así es, nos vemos luego.- Y se marchó con una sonrisa engreída.

-Una nueva Rebelde...

-¿Qué tiene de malo?

-Nada, incluso te pega.

-Jaja, ¿Se supone que tiene que hacer gracia? Porque si es así no la causa. Me dejarías ir hoy con las chicas.

-Jade, eres...-Le corté.

-Que sí, soy tu responsabilidad, pero estaremos en la habitación de Eri.

-Vale, pero no más de dos horas.

-Hecho.

Había terminado los deberes e iba a salir a la habitación de Eri.

-¿Ibas a algún sitio?

-Que susto Gabi, y sí, iba a la habitación de Eri.

-Te acompaño.

-Bien.

-Gabi, puedes irte, estaré bien.- Estaba intentando entrar al cuarto de Eri, pero Gabi no me lo permitía.

-Primero me aseguraré de que es aquí donde estarás.

-¿Y dónde estaría sino?- Añadí con una sonrisa, él me dio una mirada de no soy tonto.- Estaré aquí no te preocupes.

-No digo lo contrario, solo quiero asegurarme de que así sea.- Dicho esto llamo a Lucía, esta después de asegurarle que ella nos vigilaría Gabi se fue.

-Parece que alguien va tener cuidador difícil.- Comentó Dani.

-Nah, algo se me ocurrirá para que no me siga a todas partes.

-Pues te deseo suerte, yo intenté de todo con Lucía y sigue pegada como una lapa.- Dijo Eri.

-Bueno, nos vamos del tema, hoy vamos a explicarte como funciona este instituto o reformatorio, como lo quieras llamar.- Empezó hablando Dani.

-Me quedo con la segunda.- Dije.

-Muy bien.- Continuó Dani.- Aquí como en todos lados hay las chicas fáciles, por no llamarles de otra manera, también puedes llamarlas la abeja reina y sus discípulas, que es como las llamamos Eri y yo, por si no queda claro quienes son, las que nos molestaron esta, mañana, siempre lo hacen, y nosotras con ellas, digamos que una pelea ente la abeja reina y las chicas rebeldes, que así es como muchas veces nos llaman. Después también están los deportistas, los nerd y la demás gente, pero esos cuatro grupos son los que más llaman la atención, la abeja y sus discípulas por ser unas fáciles, nosotras porque nadie se mete con una rebelde o acaba mal, da igual de que grupo sea, los deportistas, fáciles de reconocer, no tienen cerebro, en vez de eso un balón en la cabeza, y los nerd que destacan por su inteligencia. ¿Entendiste?

-Si.- Digo.

-Bueno, tu ya eres una chica rebelde, así que no te preocupes, nadie se meterá contigo.- Dice Eri.

-Chicas, siento interrumpir, pero Jade se tiene que ir.- Dice Lucía.

-Chao chicas, nos vemos mañana.

-Chao.- Dicen al unísono.

-¿Tienes la llave?- Pregunta Gabi.

-Si ¿Por?

-Se me olvidó la mía.

-Y que pasaría si se me olvidaba.

-Ir a pedir una a recepción.

***

Abrí la puerta y fue al baño, una ducha me vendría bien.

Escuché abrirse la puerta y ví aparecer a un Gabi sin camiseta, creo que hacía deporte, tenía unos músculos bien trabajados, espera que estoy haciendo, mirándole los músculos cuando se supone que yo estoy desnuda, bueno, por suerte había una cortina, pero era blanca, por lo que dudo que tapara mucho.

-Gabi, hay petar antes de entrar en el baño.