-Para ya de dar vueltas por la tienda.- Desde que se habían ido Eri y Dani entramos a una tienda y Gabi no paraba de dar vueltas.
-Es que me aburro.- Se quejó como un niño pequeño.- Escoge un vestido ya, llevamos mirados trece vestidos y no te gusta ninguno.- Bufa.
-Es que no quiero un vestido cualquiera, quiero el vestido perfecto.
-Pues no lo vas encontrar.- Mira que era pesado, giré la cabeza y ví mi vestido perfecto, me encantaba.
-Creo que ya lo he encontrado, acompáñame, iré a probármelo.
-¿Qué tal me queda?- Salí del probador y le enseñé el resultado a Gabi, a juzgar por su expresión yo diría que me queda bastante bien.
Era un vestido negro, parecía bastante sencillo, pero en realidad no lo era. Era palabra de honor, iba entallado hasta mi primera curva, con una preciosa tela negra, parecía de lentejuelas ya que brillaba, pero en realidad no era de lentejuelas, donde acababa el precioso entallado empezaba un gran vuelo de tul negro, que llegaba apenas por debajo de mi muslo ( Con apenas quiero decir que no llegaba ahí...)
-Ehh...- Se aclaró la voz.- Te queda muy bien.
-Si, este es el vestido perfecto.
-Pero es que este tacón es demasiado alto, y este otro es demasiado bajo, no sé, estoy indecisa.- Después de comprar el vestido llevábamos más de una hora eligiendo los tacones, pero no me daba decidido.
-Solo tienen de diferencia dos centímetro.- Dice desesperado.
-Pero aunque no lo creas se notan.- Me volví a mirar los pies. Me giré hacia la dependienta.- Me traes unos más altos por favor.
-Diez minutos mirando cuales te quedan mejor para al final acabar pidiendo unos más altos, ¡Es que no me lo puedo creer!
-Estos, me llevo estos.- Anuncié.
-Ya era hora, pensé que nunca acabaríamos con esto.
Al final decidí comprar unos tacones de diez centímetros con plataforma, junto con un bolso de fiesta pequeño de lentejuelas.
-Muy bien, ahora que ya terminamos de comprar el vestido llama a tus amigas para volver.- No creo que eso sea necesario querido Gabriel, estaba presenciando una escena graciosa, Eri y Dani estaban intentando explicarle al policía algo.- ¿Esas son...- Oh si, esas son, ni siquiera terminó la frase, sabía cual iba ser la respuesta, fue directamente hacia donde se encontraban.
-¿Qué pasó?- Exigió saber Gabi.
-La pelirroja le dio un puñetazo a un policía.- Explicó el policía.
-¡Que era un pedófilo!- Se defendió Gabi.
-Vale, contadme la historia para que me entere de algo.
-Yo la explico.- Se ofreció Eri, la otra chica asintió con la cabeza.- Estábamos ligando con unos chicos, ellos nos dijeron que nos fuéramos a su casa, le dijimos que no podíamos, pero insistieron, entonces pasaba un señor por allí y nos cogió a cada una por un brazo, nos asustamos y pensamos que era un pedófilo, así que Dani le dio una patada en la parte más sensible del hombre, sí, me refiero ahí abajo.- No puede evitar reír, tenía su gracia.
-Agente, solo fue una confusión se asustaron y por eso lo hicieron.- Se excusa Gabi.- Por favor no presenten cargos.
-Esta bien, que no vuelva a ocurrir.
-Os podrían haber llevado a pasar la noche a una celda lo sabéis ¿No? – Dijo Gabi.
-Si, lo siento no fue nuestra intención solo nos asustamos.- Dice Eri, parecía la más sensata de las dos.
-Vale, otra pregunta ¿Estabais ligando con chicos?- Sigue interrogándolas.
-En el reformatorio no hay mucho donde escoger. – Dice Dani encogiéndose de hombros.
-¿Se lo vas a decir a Lucía?- Érica parecía preocupada.
-No, me mataría si supiera que os dejé solas.
VUELVE A REPETIR ESO Y TE JURO QUE LITERALMENTE TE QUEDAS SIN
DIENTES
-Jo, quiero cambio de vestidos el tuyo me gusta más que el mío.- Dijo Dani, cuando le había enseñado mi vestido se pusieron como locas, según ellas es el vestido más bonito que vieron en sus vidas...
-Pues lo siento, pero lo del cambio no va ser posible.- Dani puso morritos.- Acéptalo, a ti no te quedaría bien, así que es mejor que yo me lo quede.
-¿Qué pasa que por que tu digas que no me queda bien va ser así?
-Exacto.
Un sonido invadió la habitación, un pero era un sonido que desconocía.
-¿Qué es ese sonido?- Pregunté.
-Es el timbre, deberías ir abrir la puerta.- Dijo Eri.
Me levanté y fui abrir la puerta. Pero desgraciadamente no me gusto la persona que estaba tras ella.
-Hola.- Dijo Tiffany con voz super aguda. - Vengo a ver a Gabi.
-Oh, pues lamento decirte que no está.- Completamente mentira, Gabi estaba en su habitación haciendo no se qué con el portátil.
-Bueno, por si estás mintiendo yo misma pasaré a comprobarlo.- Dijo, y con esto se disponía a entrar, pero yo la paré.
-Acaso no escuchaste, dije que no está.
-Acaso no escuche tú, porque yo dije que iba entrar, y nadie me dice que hacer o que no hacer.- Dijo con voz de superioridad.
- Corrección, nadie excepto yo, así que date la vuelta y vete por donde viniste.
-No eres quien para decirme lo que debo hacer.
-Tienes razón.- Dije y ella sonrió.- Pero si soy quien para echarte fuera de aquí.
-¡No, no eres quien!- Dijo demasiado alto.
-Si lo soy, y ahora fuera.
-¡Eres una puta!- Dijo gritando, eso fue suficiente ruido para que Gabi, Eri y Dani, salieran de las respectivas habitaciones.
-Repite lo que acabas decir.- La reté.
-Dije que res una P-U-T-A. – Dijo diciendo la última palabra más lentamente.
-Vuelve a repetir eso y te juro que literalmente te quedas sin dientes.- La amenacé.
-Eres una puta. - Eso bastó para que me abalanzara sobre ella y empezara a tirarle del pelo, y fue porque Gabi me agarró y me separó de ella, sino juro que la habría dejado sin dientes.
-Ya basta.- Gritó Gabi.- ¿Qué pasa?
-Jade me mintió diciendo que no estabas y...- Empezó diciendo Tiffany, pero yo la corté.
-Si te mentí es porque puedo hacer lo que me dé la gana, lo captas o te lo explico con manzanas.
-Eres una puta.- Dijo, me iba abalanzar otra vez sobre ella pero Gabi no,me dejó.
-Lárgate aquí o hoy empezaremos la tercera guerra mundial, y no quiero que te rompas una uña.- Ella se marchó fingiendo indignación.
-¿Qué paso?- Preguntó Gabi.
-Nada interesante.
- Se lo tenía merecido.- Dijo Eri cuando les terminé de contar lo que había pasado con Tiffany.
-Tienes razón. Pero una pregunta, ¿Este internado no era solo para adolescentes problemáticos?, Digo, Tiffany es incapaz de pelear con alguien porque se puede romper una uña.
-Bueno, realmente es un internado en el que puede ingresar cualquiera, ya que es privado, pero en este último tiempo debido a la tanta atención del centro y de los cuidadores se puso más de moda para los adolescentes problemáticos.- Explicó Dani.
-Ahhh....
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Jade
Romance-Es mejor que piensen que no tienes corazón, así no intentarán romperlo. -Así que por eso eres así. -En parte si. -Pero para que la gente se comporte así, normalmente siempre suele haber una historia, un pasado escondido ¿Cuál es el tuyo? -Eso es a...