El verano en el que me enamoré ➺ HYUNIN

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Jeongin estaba más feliz que nunca, ese día por fin se pudo comprar el bolso de temporada que tanto había querido, no podía esperar a ver la cara de Blair cuando lo vea, iba a ser hermoso.

Este era Yang Jeongin, era hijo de los Yang los cuales eran dueños de una de las empresas de marketing más conocidas a nivel mundial, siempre lo tuvo todo: dinero, comodidad, privilegios y belleza, amaba su vida y la vida lo amaba a él o por lo menos así lo veía. Tenía dos amistades en concreto, la primera Im Bomi, era hija del CEO de samsung y su amiga desde muy niños. La segunda, Alisson Blake, era hija mayor y futura heredera del imperio Blake's cave, una cadena de bares muy famosa en Inglaterra. Los tres eran mejores amigos desde la secundaria y nepo babys, pero claro ninguna historia estaría completa si no hay un villano ¿no? Pues en su vida esos eran Blair Jones y sus dos mascotas Kim Jihyung y Amira no sé que. Blair era hija del CEO de apple, Jihyung hijo del dueño de una cadena de restaurantes y Amira era sobrina del príncipe de Arabia Saudita.

Todo lo que rodeaba a Yang Jeongin era de alto rango, desde su nucleo familiar hasta el último zapato de su closet.

Muy feliz con su nueva adquisición bajó de su BMW el cuál había sido un regalo de su padre por su cumpleños número veinte, entró a su casa cuando notó algo fuera de la común, sus padres estaban en casa antes de las once un día sábado, eso no era normal en lo absoluto.

—Jeonginie por fin llegaste—exclamó su madre.

—Hola mamá, papá ¿que hacen aquí a esta hora?

—La reunion se canceló a último momento, así que tu madre y yo decidimos venir a descansar un poco.

—Oh me alegro, déjenme pongo esto en mi cuarto y...

—¿Compraste algo?—preguntó su padre al ver la enorme bolsa con el logo de Chanel en ella.

—No es nada, solo un bolso.

—¿Y cuanto te costó ese bolso?—inquirió ahora su madre.

—Creo que unos...siete mil ochocientos ochenta dolares más o menos ¿por qué?

La cara de sus padres se volvió un poema al él revelar el precio, ¿ahora que les pasa? ¿Desde cuando se ponen así por una de sus compras? Honestamente sentía que estaban dramatizando un poco la situación.

Sus padres se vieron por unos instantes y luego su madre simplemente asintió.

—Jeongin tu madre y yo lo hemos hablado y creo que lo mejor para ti es que te tomes un descanso de tu vida.

—¿Qué?—la cara de Jeongin se torció en una mueca de confusión.

—Tu padre y yo decidimos que te irás a quedar todo el verano con tu tío San.

Ante aquello Jeongin solo pudo reír, debía ser una broma, no, en definitiva era una broma de mal gusto.

—Ya dejen de bromear, voy sa subir esto y luego podemos...

—No, Jeongin, no es ningún juego, gastas nuestro dinero a diestra y siniestra, no trabajas y sigues yendo a ese club de golf carísimo todos los domingos cuando tu ni siquiera sabes jugar golf.

La cara de indignación del menor podía parecer tierna, pero sus padres estaban hablando muy en serio. Desde muy niño siempre se lo dieron todo, lo sobre protegieron no dejando que se encargase de sus problemas solo, lo dejaban que hiciese lo que quisiera y le daban acceso a grandes cantidades de dinero, pero ya estaba llegando a un límite.

—¡Oigan yo sí trabajo! ¿Quien creen que fue a comprar el mercado la semana pasada?

—Eso no es trabajo, Jeongin, es lo que te toca por vivir bajo nuestro techo.