-Gracias de todos modos Michael.- nos quedamos en silencio, él está con su celular escribiendo a alguien, entra una llamada y se levanta a contestarla, al poco rato esta malhumorado y suelta un insulto a la persona que le ha llamado, cuelga y se acerca a sentarse de nuevo.-
- ¿Paso algo?- fue lo único que pude decir, él me mira y suspira.-
-No, nada importante- nos quedamos callados sé que no me dirá pero presiento que fue su chica la que llamo.-
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Hemos estado aquí durante dos horas, el médico aun no nos dice nada de mi hija y hasta me he puesto a llorar por pensar lo peor, Michael no se ha separado para nada de mi lado, ya son las 6:30 de la mañana logré llamar a mis padres y les conté todo, en un principio casi me gritan por no llamarles antes pero luego les dije con quién estoy mi papá se molestó pero no era momento para eso, me dijeron que llegarían en un momento, también llame a Stefan, también se encuentra en camino, se le notaba muy preocupado, estoy recostada en el hombro de Michael, no quise pero el insistió me he quedado dormida un momento mientras espero a que el doctor salga.-
-¿Estás cómoda?- se acomoda haciendo que mi cabeza toque su pecho y me siento más cómoda, su corazón late muy fuerte, en otros momentos estaría muy feliz teniéndolo así, ¡maldito corazón de amarlo aún! Escucho unos pasos apresurados y en mi campo de visión aparece Stefan, me mira y yo me incorporo, sin ver reacción alguna de Michael, camino apresurada a Stefan y me abraza con fuerza, su cuerpo fornido impacta con él mío.-
-¿Te encuentras bien?- me toma las mejillas.-
-Sí, Michael estuvo conmigo todo el momento que la bebe estuvo mal.-Él se acerca a Michael y este se levanta.-
-Hey, gracias por cuidar de mis mujeres.- Su mirada de Jackson se torna desafiantes, sé que dirá algo destructivo, me acerco a ellos.-
-Es mi obligación mi hija y Scar me necesitan.- acentúa la palabra mí, el ambiente se torna violento.-
-Eso lo dices ahora, pero antes ni te preocupabas por ellas.- Stefan lo mira mal.-
-¡Stefan!- le reprendo, Michael lo toma de la camisa y lo golpea contra la pared ¡mierda!-
-¡Tú no sabes que mierda paso entre nosotros! ¡No te metas conmigo hijo de p....!
-¡Ya basta! ¡Están en un lugar público!- me acerco a ellos y los alejo poniéndome al centro.- si van a pelear háganlo lejos de aquí.- me siento lejos de ellos, ellos se observan como si se quisieran matar al poco rato aparece el doctor.-
-Familia de la pequeña Rachelle Jackson- nos levantamos los tres hacia el doctor pero soy la primera en llegar.-
-¿Cómo se encuentra mi hija?- suspiro esperando una respuesta.-
-Tranquila señora, su hija está mejor, cuando llego estaba con mucha fiebre, se debe por una infección al estómago y le quiso dar una fiebre interna, llegaron a tiempo ahora está tranquila, se le bajo la fiebre con medicamentos de dosis muy pequeña y se le administró medicamentos para su infección, ahora está con mucha hambre es una bebé muy fuerte y puede llevarla hoy mismo a casa si eso lo desea usted y su esposo, si gusta pueden pasar a verla está en una habitación donde se encuentran todos los bebés es la número 343.- dicho esto se retira y un sonrojo aparece en mis mejillas por decir que somos esposos, miro a Michael y luego a Stefan que esta serio-
-Iré yo primera.- les hablo a los chicos caminando hacia la habitación, cuando llego abro delicadamente con el miedo de despertar a los bebés dormidos, hay madres aquí y están dando de lactar, me acerco a mi hija que esta con sus manitos jugando.- Mi bebé.- suelto el aire de verle, ella suelta un quejido de felicidad, levanta sus manitos para que la cargue y eso hago, la tomo en brazos y veo como con su boca y sus manitos busca mi pecho, suelto una risita.- estás muerta de hambre mi Ray, ahora vas a comer.- camino hacia una silla y me siento, la acomodo y le empiezo a dar de lactar, ella desesperada succiona y yo no puedo dejar de mirarla.-
-Es muy hermosa.- levanto la mirada y veo a Michael con una mirada tierna, quiero hacerme la fuerte por mi hija pero no puedo es difícil aún sentir cosas por alguien que no te es correspondido.-
-Sí, se parece mucho a ti.- admito mirándola nuevamente, Michael se sienta a mi lado y observa como toma su leche.-
-Me siento mal por no estar contigo desde que me enteré que iba a ser papá, me siento tan estúpido.- le miro y niego con la cabeza, no quiero empezar una pelea delante de muchas madres y de bebes durmiendo sobre todo de mi hija que está alimentándose.-
-Lo hecho, hecho está, no es necesario que ahora te sientas mal luego de dejarnos, pero no llevemos a tema esto, no quiero tener una charla sobre el problema que nos abarca a los dos, por favor.- el asiente y se le queda mirando nuevamente a Ray.-
-¿Puedo cargarla? – le miro.-
-Si no se queda dormida, por supuesto que puedes cargarla pero si se duerme lo dudo, es un poco quejumbrosa cuando la depositan en la cuna.- él suelta una risita y luego me mira.-
-Gracias por haberme llamado – acaricia la mejilla de Ray que ella lo observa y deja mi pecho para ver a su papá, yo intento ocultar un poco mi pecho pero Ray no me deja puesto que vuelve a succionar.-
-No tenía a quien más, estaba muy asustada – miramos a mi hija.- ella es muy curiosa con las personas que no conoce, si te fijas haces algo y ella ya está mirándote.- Michael le sonríe.-
-Ray, ven con papá – le extiende las manos y ella suelta mi pecho para mirarlo y soltar una risita contagiosa a lo que yo me río y Michael también.- mi pequeña – le acaricia la mejilla.- ven con tu papá – tengo un nudo en la garganta por las palabras que Michael está empleando. Ella ignora que está alimentándose y se sienta, levanta las manitos hacia Michael y él me mira.- ¿La puedo cargar? – pongo mi blusa en su lugar y asiento, Michael la toma en brazos delicadamente, se nota que tiene un cierto temor en dañarla, su mantita la dejo en el regazo de Michael, él la echa en su pecho y ella está dándole besitos en su pecho.- es muy hermosa.- dice al mismo tiempo que me observa yo solo sonrío.-
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UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD
RomanceScarlett Tyler es una joven de 19 años que vive con su pequeña hija de 2 meses en la ciudad de California, lucha por un futuro prometedor para su pequeña Rachelle, ya que ella sólo quiere que su hija no le falte nada. Pasará por muchos problemas...