UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD

CAPÍTULO 03

-¿Mi hija?-es lo primero que sale de mi boca y él abre levemente los ojos.-

-Cariño-habla Stefan y observo como Michael cierra sus manos en un puño.- está durmiendo, la he dejado en su cuna-suspira-

-Bien.-levanto la mirada hacia Michael que abre la boca para hablar y yo levanto la mano para que se calle.- necesito ver a mi hija... cuando la vea si deseas algo hablaremos.- volteo para irme hacia una puerta que está cerca.-

-Quiero verla-es lo que sale de sus labios y yo niego con la cabeza.-

-No...-es lo único que digo antes de entrar y cerrar la puerta, veo a mi bebé durmiendo plácidamente, suelto un leve sollozo ante la idea de que este afuera en este momento con mis padres, me siento a un costado de su cuna, en la mecedora que tengo y solo la escucho respirar rápido, acaricio su mejilla rosada y veo como hace un puchero, siempre estaré agradecida que los que me aman cuidan a mi hija mucho.-

-Necesito verla-escucho fuera de la puerta, me levanto despacio limpiándome las lágrimas rápidamente, beso la pequeña mejilla de mi bebé y la cubro con su manta para luego caminar hacia la puerta.-

-¡Mierda!-grita Stefan antes de que la puerta se abra de un solo golpe, me observa detenidamente y observa la cuna intenta llegar a ella pero me pongo en su camino.-

-Aléjate de mi hija...-susurro-

-También es mía- me dice mirándome a los ojos, como es más alto que yo él tiene que bajar la mirada.-

-Dejo de ser tuya desde que te fuiste- intento empujarle pero no se mueve.- aléjate de ella- él me mira y da un paso atrás, camino hacia él y empezamos a caminar fuera de la habitación de mi hija cuando estamos afuera cierro la puerta, miro a mis padres y a Stefan.- saldré un momento con él, miran a la bebé- dicho esto camino decidida a la puerta de la calle, al frente hay un parque así que sin decirle nada sé que me está observando, cuando llegamos al parque me siento en una banca.- ¿Qué es lo que quieres?- me mira y suelta un suspiro.-

-Aún sigo estudiando, tengo un departamento que vivo solo, si estoy aquí es para poder hablar contigo y arreglar los problemas que tuvimos, me fui lo sé pero necesito que me...

-Michael... once meses te fuiste y me parece bien que hayas seguido estudiando, lo contrario de mí yo trabajo para mi bebé, no te necesito-Siento su mano tomas la mía pero me suelto rápidamente.-

-Scarlett por favor, necesito estar bien conmigo mismo, desde que me fui no he podido dejar de pensar en ti, en como estarías cuando tu vientre crezca, te necesito aún sigo enamorado de ti quiero volver a empezar, quiero que seamos una familia yo...-le miro molesta ¿aún cree que pueda perdonarlo? Y ¿solo porque se siente el bien debo de acceder?

-Un hombre si tiene bien puesto los pantalones se quedaría junto a su mujer y a su hija, no se larga como tú lo hiciste, si bien es cierto yo acepte que te vayas aunque todo el mundo me haya dicho lo loca que estoy por hacer eso, pero pensé en ti en lo que tu anhelas para tu futuro, estoy bien sola, estoy bien con mi hija si crees que viniendo a mí y volverme a hablar con cosas cariñosas yo daré mi brazo a torcer por ti y tus sentimientos déjame decir que estás muy equivocado Krause.- me levanto.- no necesito de tu compasión y mucho menos de un padre para mi hija.- intento caminar pero él me toma de la mano.-

-Tienes que dejar que la vea, necesito conocerla quiero ver lo hermosa que debe ser, por favor ¡soy su papá!-me río ante lo irónico que se escucha.-

-Su papá... que al enterarse de su existencia se fue dejándome sola-aplaudo- felicitaciones padre abnegado-camino dirigiéndome a mi departamento pero él me toma de la cintura para voltearme.-

-Quieras o no, vendré a verlas y así no me abras la puerta estaré ahí esperando a que lo hagas, estoy arrepentido y hay cosas que tú no sabes por lo que pase o por lo que hablaron ese día en que supe que sería papá tan joven.-

-Dile a tu padre...que a pesar de sus ganas de matarme como hoy lo quiso hacer... tiene un gran valor de a ver criado 8 hijos y no dejarla a tu madre sola.- me suelto de su agarre y me alejo.- una vez más te repito ¡aléjate de ella!- y sin pensarlo dos veces camino rápido hacia mi hogar, dejándolo en el parque, entro a mi departamento y el llanto de mi bebé me hace correr rápido, me acerco a ella y la tomo en brazos tiene hambre así que me siento en el mueble y decido darle de lactar.-

-¿Estás bien cariño?-me habla mi madre viendo como mi pequeña se desespera por seguir lactando, le miro.-

-Si mami, quiere venir a ver a la bebe todos los días, le he dicho que no lo haga pero me dice que se quedará sentado afuera.- me mira con el ceño fruncido y mueve la cabeza de lado a lado.-

-No sé qué gana con esto, aun no comprendo porque regresa luego que te dejo sola ante todos los problemas-

-No sé mamá pero no va a tener mi compasión ante lo que me diga, él no me ama y sé que tampoco estará mucho tiempo aquí así que debo seguir con mi vida y ver por mi hija.- mi madre se sienta a mi lado y vemos como Rachelle toma su leche, esta vez con tranquilidad pues se está quedando dormida, papá y Stefan llegan y les comento todo lo que paso, aun no se me quita de la cabeza su mirada que verdaderamente está arrepentido pero intento de poner mi corazón en una piedra para que no me duela tanto, él jamás estaría arrepentido de dejarme sola con una bebé, a lo lejos escucho como un auto es prendido y el sonido desaparece, estoy aliviada porque ya Michael no está afuera, pero una intranquilidad se apodera de mí, veo a mi hija que ya está totalmente dormida, me levanto con mucho cuidado pues no deseo que mi pequeña vuelva a levantarse, camino para su dormitorio y la acuesto en su cuna, esta vez me siento a un lado y la observo como duerme, fue una gran bendición que mi pequeña Rachelle haya venido a este universo, me levanto sin hacer ruido, dejando la cámara de bebes encendida a su lado, luego de eso salgo sin hacer ruido, cuando estoy fuera de la habitación veo a mis padres junto con Stefan conversando y sé que es de lo sucedido, Stefan me sonríe.-