NEWT

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"HELP IN THE GARDEN"


Levantándome otro día en el área, como cada día que pasa, mi habitación compartida con Teresa se hace cada vez más chica, más monótona, las ramas de árboles crecientes en cada esquina, la dura cama y el mismo vasto desayuno, no había soledad, estábamos todos juntos, pero el vacío que se sentía, la falta de libertad, agobiaba mi alma cada día.

Me vestí, con las mismas ropas que siempre he tenido, desayuné lo mismo que cada día, añoraba algo diferente, un sentimiento diferente, algo que cambiara mi tan desagradable rutina.

—Violet, recuerda que hoy tienes trabajo en el jardín.— dijo Gally cuando me vio con la mirada perdida.

—No quiero Gally, sabes que nunca he sido buena para el jardín.—

—Newt dijo que te ayudaría.— masculló con una sonrisa ladeada, sabía a qué se refería.

— Si lo hará, ¿porqué no me lo dice en persona?.— respondí cruzada de brazos.

—Sabes que es tímido.— dijo.

—No se le veía lo tímido cuando muy amablemente sostuvo a Teresa  para que no se cayera.—

—Soy yo o eso sonó como a, ¿celos?.— dijo soltando una carcajada.

—Vete al carajo ¿quieres?.— dije enfadada saliendo del lugar.

Estaba acostumbrada a peleas matutinas con Gally, el chico era un idiota.

Escuche un grito a mis espaldas, tal vez un "perra" de su parte, pero mi relación con Gally era extraña, un día amigos y otro día enemigos; aún así siempre ha estado ahí para escucharme, en especial cuando tengo que hablarle sobre Newt.

Ahh, claro, Newt, el dulce y amable Newt, sus acciones son tan confusas que ya no sé que puede querer este joven rubio.

Caminando hacia el jardín, donde ya se podía divisar la delgada figura de tal azabache, pensé por un momento en irme, correr y tal vez entrar en el laberinto y que me coma un penitente.

La cobardía me carcome y me dirijo hacia el bonito jardín que tenemos acomodado en el área, de cualquier manera, es mi deber con mi amigos y hogar ayudar aquí.

—Llegando tarde ¿eh?.— dijo Newt, alcanzándome unos sucios guantes de jardinería.

—Ew, no usaré estos, huelen a mierda de penitente.— dije sacándole una sonrisa a el joven rubio.

Ahí estaba, tal sonrisa que podía hacer brillar la misma luna, opacar al sol y hacer caer las estrellas.

—Vamos Violet, no es para tanto.—

— De acuerdo.— dije con una sonrisa fingida.

El resto de la tarde transcurrió con normalidad, nada nuevo, como siempre, estaba con Teresa ayudándole a preparar la cena, hoy había carne de cerdo con patatas horneadas, al menos tendría una comida decente.

Todos ya sentados en la rústica mesa de madera, empezaron a devorar sus alimentos como animales, aunque no los juzgo, el trabajo que da el vivir en el área es agotante.

—¿Violet?.— se escuchó la voz de un joven rubio, como siempre, sentado a mi lado.

—Dime.— dije con tono algo frío.

—¿Podemos hablar después de cenar?.— preguntó algo tímido.

—¿Sucede algo?— preguntó con curiosidad, nunca hablamos temas serios, y mucho menos en privado.

—Es algo importante, ¿ en el prado después de que todos se vayan a dormir?.— dijo esperando mi respuesta.

¿Que sucedía?, ¿Porqué me citaba después de media noche en medio del área?.

—Está bien.— respondí.

Al finalizar la comida, me despedí de Gally con un fuerte abrazo, olvidando nuestra corta pelea de esta mañana; a pesar de todo lo quería, el me protegió de todo y todos al llegar  aquí, no puedo tener mejor amigo.

Acompañé a Teresa a la habitación compartida, nos preparamos para dormir pero tenía yo que advertirle sobre mi escapada esa noche, no por nada malo, solo no quería que mal interpretara las cosas.

—Teresa, en un rato iré afuera, no te preocupes, estaré bien.

—¿Es algo sobre Newt?.— preguntó con una sonrisa, carajo, ¿como diablos sabía?, ¿tan predecible era?.

—No te preocupes, solo recuerda que debes usar protección—
dijo burlona, siendo nosotras las únicas mujeres del área, siempre hacíamos bromas de doble sentido.

Me sonrojé y ladeé una sonrisa, mientras salía de la habitación.

Al llegar, Newt ya se encontraba en el lugar, sentado y mirando hacia las grandes paredes del área, me senté a su lado y en cuanto notó mi presencia, sonrió.

—Pensé que no vendrías.— dijo.

— Digamos que Teresa, alias "madre sobre protectora", me atrasó un rato.— dije.

Sonrió de nuevo, encantándome.

—Violet, quería que vinieras porque, um, ya no quiero hacer jardinería contigo.— soltó sin más.

¿Que carajos?, solo podía pensar en el delicioso sueño que podría estar teniendo, en cambio, un joven rubio me humilla.

—¿Qué?.— pregunté con el ceño fruncido.

—Digo, um, no solo quiero hacer jardinería contigo, o sentarme a tu lado en la cena, Violet, quiero estar contigo.

¿Gally tenía razón?, ¿era un joven extremadamente tímido?, eso era todo, mi corazón era completamente suyo.

—¿Dices estar conmigo o "estar" conmigo?.— pregunto.

No hubo más respuesta que sus labios en los míos, su cálido rostro en el mío, tome su mejilla mientras seguía besándome, con tal delicadeza que se sentía como una flor.

—Quiero "estar" contigo.—

Elizabeth

𝙊𝙉𝙀 𝙎𝙃𝙊𝙏𝙎; 𝙢𝙪𝙡𝙩𝙞𝙛𝙖𝙣𝙙𝙤𝙢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora