Part:26

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La vuelta de la Sultana Kosem al palacio después de tres años de ausencia estaba envuelta en emociones encontradas.

La Sultana Kosem cruzó las puertas del palacio con sus hijos, el corazón henchido de esperanza y los ojos brillantes de anticipación. Pero al ver a Sehzade Selim con Seher y su hija, la chispa de alegría en su mirada se apagó, reemplazada por una sombra de dolor y traición.

"¿Cómo pudo seguir adelante tan rápidamente? ¿Cómo pudo reemplazarnos como si nunca hubiéramos existido?" se preguntaba Kosem, mientras una tormenta de emociones se agitaba en su interior.

A pesar de la conmoción, Kosem mantuvo la cabeza alta. No permitiría que la nueva realidad de Selim empañara el reencuentro con su familia y su hogar. Con dignidad, se dirigió a sus aposentos, decidida a proteger a sus hijos de la complejidad de la corte.

Mientras tanto, Sehzade Selim, al ver a Kosem y a los niños, sintió un remolino de remordimiento y anhelo. La presencia de Seher y su hija, aunque dulce, no podía borrar el amor y la historia que compartía con Kosem.

"Kosem," dijo Selim, acercándose con cautela, "nada puede deshacer el pasado, pero aún podemos construir un futuro. Por favor, hablemos."

Pero Kosem, con el corazón aún herido, no estaba lista para enfrentar a Selim y su nueva vida. "No ahora, Selim. Deja que el tiempo y la distancia entre nosotros se asienten. Por ahora, mis hijos necesitan paz."

Y así, mientras el palacio retomaba su rutina, la Sultana Kosem y Sehzade Selim se encontraban en un delicado baile de emociones y deberes, cada uno buscando la manera de navegar por las aguas turbulentas que habían inundado sus vidas.

Un amor entre dinastíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora