𝕰𝖑 𝕮𝖔𝖓𝖉𝖊 𝕳𝖊𝖔𝖓 • 𝕵𝖚𝖓𝖌𝖐𝖔𝖔𝖐 ⟭⟬⁷

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝕮𝖎𝖓𝖈𝖔

Habían avanzado prácticamente dos días enteros en la búsqueda de la flor y la sangre pues al inicio lo vieron fácil pero se daban cuenta que no era como lo pensaban.

Dalia y Jimin habian alcanzado a YoonGi quien los evitaba a toda costa. Después de esa noche lamentable donde perdió el control de sí mismo, despertó a las tres horas viendo a un Jimin sentado observando el cielo con sus pocas estrellas pues estaban en campo abierto.

El extrovertido al sentir a su amigo despertar lo vio neutro. No estaba enojado con él pues no era su culpa ser como es pero no justificaba que por su orgullo de decir que podría controlarse solo conllevo a lo que experimentaron horas atrás poniendo el peligro la vida de aquella humana. Ambos tomaron un poco de sangre aprovechando que Dalia aún descansaba. 

Hablaron unos momentos y el pálido decidió adelantarse y es ahora donde ambos se encontraban en camino para adentrarse en aquella montaña.

— ¿Falta mucho? —  preguntó la castaña sintiéndose un poco cansada.

— No tanto —  alentó Jimin — Una vez entrando por esos árboles ya estaremos dentro de la montaña de ahí tenemos que ir hasta encontrar un castillo o algo así donde buscaremos la sangre.

— Entiendo —  expresó Dalia. La joven solo se limitó a caminar cuesta arriba con un poco de dificultad en cambio Jimin caminaba como si nada pues tenía una idea en mente para avanzar más rápido pero no sabía si la chica accedería así que no perdía nada con preguntar.

— Dalia —  llamó a la mencionada donde se giró a ver a su acompañante — Creo que hay una forma de llegar más rápido pero depende de ti. 

— ¿En verdad? Si es asi dime no quiero dar un paso más —  se quejo pues aun sus rodillas le dolían un poco pero no dijo nada.

— Si quieres puedo cargarte en mi espalda y subir solo en esta parte inclinada — la miró expectante esperando respuesta.

La joven lo miró pensativa pues se sentía incómoda teniendolo cerca pero ya no era tanto. Pensó unos momentos en el dolor en sus rodillas y en el cansancio que empezaba a sentir y si quería que la búsqueda fuera más rápido debía hacer lo necesario para acelerarla. 

— De acuerdo — expreso tímida — Creo que asi llegaremos mas rapido y alcanzaremos al señor Min.

— Siempre tan formal — sonrío de lado colocándose en cuclillas mostrando la espalda ante la chica. — Vamos, sube — le animo.

Dalia se acercó para que Jimin pudiera cargarla en su espalda y con ella ya posicionada le advierte.

— Sujetate fuerte porque iré muy rápido — enfatizó.

Al aferrarse a los hombros, el vampiro empezó a correr a una velocidad inhumana que le saco un grito a la castaña haciendo que cerrara sus ojos automáticamente y sosteniéndose con fuerza. El aire golpeaba fuerte el rostro de ambos donde Jimin le parecía divertido esa habilidad pero para Dalia era como haberse tirado de un acantilado e ir hacia abajo a una gran velocidad.

— Listo — aviso pero la chica tenía sus ojos cerrados con la sensación de aún continuar percibiendo el aire frío. — Dalia ya estamos en tierra firme — al decir aquello la joven abrió sus ojos temerosa y ambos pudieron observar el gran castillo que se encontraba a una cierta distancia. 

— Gra-Gracias — dijo aun con aquella sensación extraña de adrenalina.

— Lo siento si te asuste — se disculpó — Vamos, el gruñón debe estar molesto por nuestra tardanza.

— Hay no — balbuceo preocupada pues sabía como era el carácter de aquel vampiro. 

Empezaron a caminar hasta encontrarse en la entrada para buscar al pálido y juntos encontrar el primer objeto.