- "Estoy muy orgullosa de ti, cariño. En el futuro serás el Rey Consorte del Quinto Gran Clan. Recuerda, debes hacerlo bien."
Fue lo que le dijo su madre, la Reina Consorte Zeyneb 'shni' Waari, cuando tenía 7 años.
...
- "Ah, estoy tan decepcionad...
El surrealismo es la sorpresa mágica de encontrar un león en el armario donde quería tomar una camisa.
- Frida Kahlo
"Y bien, ¿por qué estamos aquí?" preguntó Warrehn ásperamente. Se notaba que estaba aquí solo por consideración a su primo, y no por divertirse.
Naro les había pedido que lo siguieran, una vez que dejaron atrás el ascensor de la gran arena. Y aquí estaban frente a un ... ¿laberinto enorme?, que tenía múltiples entradas, todas luciendo exactamente iguales, en alguna ubicación remota del 9no Gran Clan. El grupo formado por Räeesar, Aedan, Samir, Warrehn y el propio Naro, estaban de pie ante enormes paredes de vegetación, de aproximadamente 10 metros de altura, al final cubiertas por espesas enredaderas que dificultaban el ingreso de la luz, lo cual le daba un aspecto mas terrorífico que divertido, pensó Aedan, al recordar que Naro había mencionado algo sobre un juego.
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"Definitivamente tienes un mal temperamento primo, relájate un poco. Casi arruinas la entrevista hace un momento, no pienses mal, creo que es genial recalcar tu punto de vista, pero la forma de hacerlo no fue exactamente amistosa, si entiendes lo que quiero decir." Dijo Samir pasando un brazo por los hombros de Warrehn con familiaridad.
Warrehn se encogió de hombros. "Hacía preguntas estúpidas."
Samir le dirigió una mirada poco impresionada. "Se supone que la misión es ganarse a los medios y la opinión publica. Pensé que estábamos en la misma pagina."
"Sí, claro." respondió Warrehn secamente quitándose de encima el brazo de Samir.
Samir negó con la cabeza sonriendo como un padre mirando a su hijo hacer una rabieta.
"Ok. Basta ya de eso." Naro llamó la atención de todos "¡Les mostraré algo que los animará a todos!" Presiono su comunicador unas veces, y unos minutos después aparecieron 5 personas, por su vestimenta, cuidadores, cada uno de ellos tirando de un zywern ensillado.
Verlos de cerca era mucho más fascinante que a través de pantallas gigantes. Las poderosas patas cubiertas de musculatura exudaban una fuerza increíble, por no mencionar sus grandes alas, emplumadas pero de ninguna manera delicadas.
"Después de mucho esfuerzo, logré obtener un permiso especial para un partido amistoso entre nosotros, con puro fin de sano entretenimiento, sobre Khaos, el nuevo jardín favorito de juegos de mi madre,solo por este día especial. ¡Ni siquiera yo he entrado todavía!" declaró con entusiasmo. "Estos son Homero, Kyly, Farud, Gresia y Ubile. Mis 5 preciosos niños y niñas más consentidos. Farud es mi montura." - presentó mientras se acercaba al zywern color rojizo atardecer y le acariciaba el cuello.
"Adelante, tomen uno." instó, al ver que nadie se movía. "Esta es una oportunidad muy especial, el que podamos volar hoy aquí."
Aedan sonrió mientras se acercaba al zywern azulado. Realmente parecía que Naro había puesto mucho empeño para realizar esto hoy. No es fácil volar zywerns en lugares no registrados.
