10: Amnesia

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"Nada de lo que sucede se olvida jamás, aunque tú no puedas recordarlo". 

- (El viaje de Chihiro)


"Dra. ¿Cómo está él?" preguntó Samir ansioso poniéndose de pie tan pronto como la Dra. Jemnkkims salió de la sala de cuidados intensivos. 

A su lado estaba Naro, con los ojos rojos y un poco hinchados, probablemente había estado llorando antes.  Räeesar y Aedan también se pusieron de pie y se acercaron. 

Aedan estaba muy nervioso, justo después de que Warrehn se hubiera comportado de esa manera extraña, un equipo de búsqueda, liderado por Samir, los había encontrado, pero Warrehn había vuelto a desmayarse.  En ese momento fueron trasladados de emergencia al centro médico privado del 9no Gran Clan. Aedan le había explicado a Samir y los demás lo que paso, y un pesado silencio se instaló en el grupo.

Nadie había sido capaz de mencionarlo pero todos lo sabían, alguien había atentado contra la vida del príncipe Warrehn. 

"El Rey esta fuera peligro. Físicamente no hay ningún problema." dijo la dra. Jemnkkims  "Ahora bien, respecto a su salud mental es otro tema, sufrió una conmoción cerebral ocasionada por el golpe en la cabeza debido a la caída, y después de realizarle varias pruebas hemos concluido que... parece sufrir amnesia disociativa." 

Al ver la mirada de confusión de todos, la doctora explicó: "La amnesia disociativa es una perdida de memoria que suele surgir como reacción a acontecimientos impactantes, angustiosos o dolorosos y ayuda a alejar los recuerdos difíciles. Estas lagunas o incapacidad para recordar acontecimientos de la vida abarcan por lo general desde unos pocos minutos a horas o días, pero también pueden abarcar periodos de años, décadas o incluso toda la vida. No estoy 100 % segura pero al parecer su alteza, el rey Warrehn, ha perdido la memoria de 18 años de su vida. Y solo conserva los recuerdos de antes de que ocurriera el incidente de su desaparición debido al intento de asesinato por parte de sus guardaespaldas en aquella época." 

Se escuchó una exclamación ahogada y Samir sujetó a su esposo Naro quien casi se desmaya debido a la conmoción de escuchar semejante noticia. 

"Es  mi culpa, es todo mi culpa." repetía Naro mientras negaba con la cabeza "Si no hubiera sido por mi insistencia en participar en ese estúpido juego esto no habría sucedido." Se culpaba a si mismo incesantemente. 

"No digas eso, amor, no es así." consolaba Samir dándole palmaditas en la espalda. Pero se veía en su rostro que él también estaba devastado.

"¿Tiene cura?" preguntó Aedan. 

"No se sabe a ciencia cierta. Cada paciente es diferente, sus recuerdos podrían regresar de golpe mañana, o regresar paulatinamente, o, podría quedarse así por meses e incluso años. Tratamientos como la psicoterapia e hipnosis podrían ayudar, pero no estoy segura de que tanto."

Aedan asintió. "¿Podemos verlo?"

"Sí, esta despierto ahora." accedió la dra. "Esta demás que les recuerde que tengan cuidado al hablar con él, su salud mental es muy delicada. Cualquier situación estresante para su memoria podría desencadenar un trauma irreversible en esta."

"Esta bien dra."

...

El sonido constante del goteo de la intravenosa era particularmente notorio en la silenciosa habitación. Después de haberse sumergido en el líquido curativo, las feas heridas que tenía antes eran ahora meros raspones menores que sanarían en su totalidad en un día o dos. Su brazo izquierdo descansaba en un cabestrillo, y su frente envuelta cuidadosamente en una gasa blanca. 

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