Solté la última bocanada del que fue en algún momento un cigarrillo y arrojé la colilla al suelo para a continuación restregarla con la suela de mis botines.
-¿Falta mucho?.- pregunté impaciente.
Hacía ya hace poco más de una hora que nos encontrabamos mi querido amigo Charles y yo en la concurrida estación de trenes de Lancaster en espera de la misteriosa chica de quien Charles no había parado de hablar en las últimas semanas y por lo poco que sabía de ella, gracias a mi falta de interés, fue que era como la típica chica impulsiva y ocurrente de la que muchos hablan. Incluso Ryan sonrió al escuchar que vendría a pasar las épocas decembrinas con nosotros, y eso ya es sufieciente para alimentar mi curiosidad por verla con mis propias pupilas.
Entonces a Charles se le iluminó la mirada al observar a una chica rubia, con una barriga de apróximadamente, si mi intuición no me falla, unos siete meses de embarazo y cargando duramente tres enormes valijas.
Debo decir que eso quebraba toda espectativa de admiración de mi hacía la enigmática Emma.
-¡Hey, déjame decirte que extrañaba ver tu feo rostro!- soltó Charles divertido, al ver que la rubia se acerco lo suficiente para escucharlo.
-Cálla marica, y ven a ayudarme. ¿Qué ya ni para eso tienes bolas?
Mmm bueno, esto resulta ser un poquito incómodo, ya que al parecer se habían olvidado de mi presencia.
-¡Wow! Después de un año de no cruzar miradas, al fin nos vemos. No pasan ni dos segundos y estamos hechando bronca.
-Esto es lo que hacemos.
-Bueno, pues si quieres llegar hasta la camioneta antes del anochecer con todo ese equipaje, más vale que le vayas apurando.- Sentenció Charlie, al principio pensé que se trataba de una broma,pero al ver que avanzó sin preocupación hacia el estacionamiento me dí cuenta que este idiota no le ayudaría a su amiga en estado de gestación.
-Serás hijo de puta.- Susurró la chica.- ¿Podrías ayudarme con esto, niña bonita?.- Me sonrió y así fue como terminé cargando las maletas yo sola hasta la Combi.
Íbamos en camino a casa y en todo el recorrido yo no había dicho ni media palabra, estos dos no se habían dedicado más que a ignorarme y la situación comenzaba a fastidiarme. Luego de un momento percibí que en realidad nos dirigiamos a la casa abandonada, lo que se me hizo extraño, pero desde luego no dije nada.
Al subir y sentarnos (ellos en la cama y yo en una de las sillas plasticas que conseguimos como sofás inprovisados).
Hable por primera vez.
-¡Santo cielo, no han dejado de hablar desde que salimos de la estación!- dije y de inmediato me arrepentí. Fue inconsiente, lo juro.
-¡Vaya, la niña bonita sí puede hablar, y tiene cojones!- habló Emma y se me subió la bilis hasta la garganta.
-¡Basta, Emma! Es obvio que puede hablar, sólo que tu vulgaridad la ha dejado sin habla.- Me "defendió" Charles y le agradecí con lo más parecido a una sonrisa.
-¿Cuántos meses tienes?- cuestioné acerca de su embarazó, pero ella comenzó a reír a carcajadas. A veces sólo debería quedarme callada.
-Oh, gracias por recordarme.- dijo ya más calmada y desprendiendo su barriga, que en realidad se trataba de una masa de dulces y comida chatarra acomodada estrategicamente para lucir como, exactamente, una panza de embarazada.
-¡Oh dios! Eres una gran perra.-
-Sigue hablando. Sabes que me amas porque soy tú perra preferida.-
-Shh, déjame disfrutar este momento.- dijo abriendo una barra de chocolate.- ¿sabes que hace meses no como una de estas? Estaba muriendo internamente.
-Sabía que Madison seguía con esa estúpida idea de que bajes de peso ¿que no logra darse cuenta que estas hecho para ser una vaca hasta el último día de tu vida?
-Eh, ¿gracias?-
Y prácticamente ese fue el día en que llegó Emma. No recuerdo más porque, después de lo ocurrido opté por no volver a hablar el resto del día y sinceramente estaba muy ocupada sintiéndome nada como para escuchar su conversación.
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Where did your innocence go?
Teen FictionAlli Richards, siendo una chica con un alma inocente que comparación de todas las adolescentes de su edad vive aislada en medio de un bosque al sur de Lancaster, UK. Sólo tiene a su padre y su padre sólo la tendrá a ella, pero luego de una serie de...