CAPITULO | 29

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Me removí un poco en la cama, aun somnoliento sentí un presión sobre mi pecho que me hizo abrir los ojos de golpe, sonrei al instante, no había sido un sueño, ella durmió en mis brazos.

Se veía tan hermosa y tan tranquila, su respiración estaba tan llena de paz que me la transmitía.

Ella dormía sobre mi pecho, mis manos rodeaban con fuerza su cintura y las de ella me abrazaban por completo, no quería que se alejara. Nunca había experimentado esta sensación, nunca había dormido con una chica que no fuera mi hermana quien lo hacia cuando ella tenia pesadillas o me extrañaba.

Nunca, ni siquiera después del sexo yo había deseado tal muestra de afecto, pero ella es diferente. No se que demonios me hizo, pero quiero que se quede y viva aquí cerca de mi corazón el resto de mi vida.

No quería despertarla, pero debíamos levantarnos y arreglarnos para ir a la escuela. Así que comencé a repartir suaves y delicados besos por todo su bello rostro. Ella se removía en la cama, cosa que me daba un poco de risa, se veía muy tierna. Continúe besando su rostro con delicadeza hasta que poco a poco comenzó a abrir sus enormes y hermosos ojos.

Cuando abrio sus ojos por completo, se conectaron con los míos y eso me paralizo, sus enormes ojos brillaban de una manera sobrenatural. Eran tan especiales. Pucheritos me sonrió y eso me llevo al limite, tal como la primera vez.

No pude mas y uní nuestros labios, ambos cerramos nuestros ojos y nos dejamos llevar.

La besaba lento, sin prisa, acariciaba su mejilla con delicadeza para no lastimarla, saboreaba sus labios, tan suaves, tan dulces, tan deliciosos, pasaba mi lengua por ellos, quería devorarlos, pero entonces soltó un leve jadeo, la observe preocupado y fruncí el ceño molesto. Su labio estaba herido, así que nos separamos por completo.

Estaba enojado, no con ella, pero me mataba verla así.

-Lo..... siento.-Musite preocupado.

-Buenos días.-Susurro sobre mis labios acariciando mi mejilla, sonrei lleno de alivio y deposite un casto beso sobre los suyos.-Jeong....yo.....lo logre.-Observo tan duramente mis ojos, la detalle unos segundos y le sonrei.

-Estoy muy orgulloso se ti.-Acaricie su mejilla intentando no lastimarla.

-Me siento muy feliz, yo logre dormir en la oscuridad.

Bese su frente y luego la uní con la mía, no podía ignorar como sus ojos brillaban, estaban llenos de lagrimas, pero me aliviaba saber que no eran de tristeza.

-Gracias por no dejarme sola.-Me separe despacio para observar de nuevo sus ojos.

-Te dije que no me iría. Escúchame bien, no me iré, nunca lo hare, estaré contigo siempre.

Ella asintió sonriendo y me abrazo con fuerza, bese su cabeza y fue entonces que note aquel destello desde su dedo, tome su mano con delicadeza y la observe con detenimiento.

-¿Y.....este anillo?-Aceptaba que le tenia miedo de su respuesta, ella observo aquella joya y sonrió.

-Es muy especial para mi.-Dijo haciendo que muriera de miedo y me llenara ira.

Ella me observo en silencio un par de segundo y entonces soltó una tierna carcajada.

-Tranquilo Jeong.-Se subió un poco mas a mi pecho, así que aproveche su cercanía para comenzar a acariciar su espalda.-Este anillo me lo dio Dong-Yu, Zami también tiene uno, su significado es muy especial.-Se le cristalizaron sus ojos de nuevo mientras hablaba, yo acaricie su mejilla y sonrei enternecido.

Dentro de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora