𝑺𝑬𝑨 || 𝑷𝑬𝑹𝑪𝒀 𝑱𝑨𝑪𝑲𝑺𝑶𝑵 (𝒔𝒆𝒓𝒊𝒆!)

||𝟎𝟐||

Mientras el sol caía sobre los terrenos del Campamento Mestizo, la rubia trataba de localizar a su amigo con la mirada. No estaba practicando con la espada, por lo que debía de estar en su cabaña. Pero ella, al ser de una cabaña distinta, no podía entrar en las otras.

Por suerte, antes de que fuese a preguntar a uno de sus compañeros que se encontraban fuera, Luke apareció por el umbral de la puerta.

—¿Me andabas buscando, rubita? —le preguntó con un aire burlón, mientras caminaba hacia ella. El apodo le hizo recordar a hacía varios minutos atrás, pero decidió no mencionar nada.

—¿Cómo lo sabes? —preguntó ella rodando sus ojos mientras se cruzaba de brazos.

—Tengo ojos en todas partes. Deberías saberlo ya. —le guiñó el ojo antes de reírse. —¿Qué, has venido a por tus clases de espada?

Aquello molestó a la chica, pues ambos eran muy buenos con la espada. Aunque, obviamente, Luke se creía mejor que ella.

Lo cuál, era mentira.

—Sabes perfectamente que no las necesito. —le apuntó con un dedo en la barbilla, aunque él lo apartó al instante.

—Ya, lo que digas.

—En fin, el señor D me ha mandado a buscarte, seguramente quiere que le des la bienvenida al nuevo.

Luke frunció el ceño, al ser él el que debía conocer a los nuevos, por ser el hijo de Hermes y que su cabaña era la que los acogiese, no estaba acostumbrado a aquello ni tampoco a Aurora siendo mensajera. Normalmente, solía ir Annabeth, su compañera de cabaña, quién también se llevaba bien con el de cicatriz, pero no tanto como la rubia.

—¿Uno nuevo? Hacía tiempo que no llegaba nadie.

—Se llamaba..Percy Jackson. Es rubio, de rizos, y ojos azules. De mi edad. Demasiado orgulloso y egoísta. Te lo dejo a ti.

—Si que te has fijado en él. —dijo ganándose un empujón por parte de la chica —Vale, vale, perdona.

—Anda, seguro que está por llegar a las cabañas. —rodó sus ojos mientras empezaba a alejarse.

—¿No te quedas? —le preguntó el pelinegro, con una sonrisa, pues conocía la respuesta, pero aún así quería intentarlo.

—Me encantaría. —respondió sarcástica, lo que sacó una risa de Luke. Se despidió con un gesto de cabeza y Aurora lo imitó, mientras se alejaba hacia su cabaña.

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En cuanto Quirón se fue de la cabaña, Percy dió un paso hacia delante, y después otro, intentando ignorar que ahora era el "nuevo" y  el "hazme reír" de aquel sitio. Estaba acostumbrado a cuando se cambiaba de colegio, pero aquello parecía diferente. Todos eran muy diferentes. Su profesor de Latín tenía cuerpo de caballo, pero seguía manteniendo la cabeza, su mejor amigo tenía patas de cabra.. Y por no hablar de que todos llevaban la misma camiseta naranja.