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Me moví por toda la casa esperando que mi teléfono sonara, era lo más exasperante que había vivido..
—Carolina mi vida ¿Podrías calmarte? —Alessia pidió.
Yo me quedé viéndola un rato.
—no —dije y me senté en la cama.
Ella suspiro y se acercó a abrazarme por detrás.
—todo va a salir bien, vas a sacar veinte en tu tesis.
—juralo.
—lo juro por las chanclas rotas de mi abuela Petra, mira que tienen 70 años existiendo y aún no las bota.
Yo rei, habían pasado fácilmente dos semanas y aun no me daban los resultados de mi Tesis, dijeron que los iban a dar hoy pero aún nada.
—¿Y si te olvidas un rato de la tesis y comienzas a acomodar para el viaje? —Fabricio y mi tía estaban parados en la puerta con dos maletas y todo listo.
—dios mío y luego dicen que yo soy la fiebrua¹—Alessia volteo los ojos y se paro de su cama para sacar la maleta de su closet —Caro busca la maleta porque como son estos dos son capaces de abandonarnos.
Yo me pare y tome mis cosas para caminar hasta el garage y acomodar todo en el auto.
—nos vamos en primera clase, no vayan a andar con sus necedades —mi tía nos apunto.
—yo voy es pendiente de dormir mamá, a mí no me apuntes —Alessia dijo y entro al auto junto a mi tío.
—yo voy a intentar ver una película —yo avise y quedaron mi tía y Fabricio hablando.
—viste mamá, todo el tiempo yo —el se quejo y entro.
Todos íbamos apretados como unas sardinas, pero íbamos.
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—Fausto, y mi maleta? —mi tía pregunto mientras bajaba el equipaje de la camioneta, mi tío casi de inmediato le pasó la maleta.
