¿Amor o odio?

02

—Amiga, ¿Cómo estás?—Dijo Emilia entrando a la habitación corriendo.

—Hola Emi, bien.

—¿Qué paso?

—Le iban a disparar a un nene y bueno me dio a mí.

—¿Quién era el nene?

—No se, pero creo que era hijo de alguno de los hombres de peligro.

—Puede ser, bueno, pero estás bien vos, eso es lo importante.

Yo asentí y le di el papel.

—¿Qué es esto?

—No se, espera, ¿Estas pensado lo mismo que yo?

—Mateo palacios —Dijimos al mismo tiempo.

—Llama a mí papá.

Ella agarró su celular y empezó a llamar, en diez minutos estaba en el hospital.

Le contamos lo que pasó y el se sorprendió.

—No sabía que peligro tenía otro hijo.

—No sabemos si es su hijo, pa.

—Si, estoy seguro que si, sino mateo nunca hubiera dejado esto.

—¿Habrá sido el?

—Si gorda, ¿Sino quien más?

Yo asentí y mí papá salió de la habitación.

Volvió a los minutos con las cámaras de mí habitación.

—Si, es Mateo.

—¿Por qué hace esto?

—No se, pero algo deben tener en mente, sino nunca te dejaría esto, no se arriesgaría a venir solo.

—Si, pero, capaz de verdad solamente quiere agradecer, es su hermanito.

—No Nicki, esto no es así.

El estuvo un rato más y se fue.

—Ay dios, esto parece novela.

—Si la verdad que si.

—¿Cuándo te vas de acá?

—Supongo que mañana, no creo que me quede mucho tiempo, es más ni siquiera hubiera venido.

—¿De que hablas?

—Mi papá me dijo que a él le avisaron que estaba acá y que no sabe quién me trajo.

—Esto es raro.

Iba a hablar pero justo entro la enfermera.

—Hola.

—Hola, ¿Cómo te sentís?

—Bien, no me duele nada.

—Perfecto.

—¿Le puedo preguntar algo?

—Si, claro.

—¿Quién me trajo?

—No se el nombre, solamente se que era un adolescente de su edad más o menos más grande quizá, pero la dejo y se fue.

—Gracias—Dije más confundida que antes.

—Por nada, bueno siendo que estás bien te podes ir ahora o mañana si prefería esperar.

—Me voy ahora.

Ella asintió y me hizo firmar un papel.

Emi me dio ropa que había llevado y nos fuimos.

—Estas muy pensativa, ¿Qué pasa?