3 meses después...
Narrador:
Anahí estaba mirando hacia el techo. Una vez más, con ciertos pensamientos. Sus amigos seguían saliendo, y cada vez ella se desmoronaba más.
"Tal vez algún día él me quiera como yo lo quiero a él".
Decía Anahí en su mente.
La poca esperanza que Anahí tenía se estaba acabando. En realidad, lo más probable era que eso nunca iba a pasar. ¿Por qué no se rendía de una vez?, cada vez que sus amigos tenían una cita, se recostaba bajo sus mantas a llorar, ¿Por qué todo tenía que ser tan difícil?.
Anahí caminaba por los pasillos cabizbaja, esperando no encontrarse con esos hermosos ojos cafés los cuales amaba y miraban con tanto amor a su mejor amiga. Incluso cuando llegaba a escuchar la voz de Alfonso llamando a Dulce "Mi amor" sintió que las mariposas revoloteaban, como le gustaría que Alfonso la llamara así.
A Anahí le parecía imposible quitar a Alfonso de su mente, aunque era tiempo de hacerlo, no podía. De 100 pensamientos, 90 eran acerca de Alfonso.
Le costó, pero Anahí entendió que Alfonso nunca sería suyo, pues él le pertenecía a Dulce, y estaba bien, solo que la rubia se estaba rompiendo por dentro.
Alfonso siempre caminaba de la mano por los pasillos llenos, cegado por la hermosa luz de los ojos de su novia, los hermosos ojos cafés de Dulce que lo habían tenido enamorado de ella desde la primera vez que la vio. Aunque Alfonso extrañaba a su mejor amiga, esa chica que ahora se mantenía distante, que se mantenía cabizbaja y nunca le mostró sus hermosos ojos azules.
Alfonso intentaba hablar con Anahí, pero no era tan fácil, ya que cada vez que le hablaba, Anahí huía. Anahí ya no era la misma, y Alfonso no tenía ni la más mínima idea de cual era la causa de su cambio, pero cada vez que Alfonso quería acercarse más a su mejor amiga, aparecía su hermosa novia, llevándose toda su atención.
Alfonso amaba demasiado a Dulce. Mientras ambos pasaban sus tardes juntos, ninguna sospechaba que Anahí, la chica que los ayudó a estar juntos a pesar de que amara a uno de ellos, se estaría rompiendo por dentro al verlos besarse, ninguna sospechaba que Anahí fingia sonrisas al ver sus manos dulcemente. entrelazadas, ninguna sospechaba que Anahí sollozaba en silencio, o que incluso había faltado a clases para no hacer notar sus ojos hinchados.
Quizás algún día, Anahí, Dulce y Alfonso vuelvan a ser el triángulo perfecto, con una pareja entre ellos. Quizás algún día Anahí comience a enamorarse de la forma de ser de otra persona que no sea Alfonso, del cual lleva colada desde la primera vez que lo vio.
Algún día Anahí mirará los ojos de Alfonso, sin el mismo amor, y en vez de romperse, le dirá que está saliendo con alguien más.
Quizás algún día Alfonso se cansará de todo esto y tomará a Anahí por la cintura, obligándola a mirarlo a los ojos, y algún día, Alfonso la mirará a los ojos y se dará cuenta de que su luz era más hermosa que la de su novia.
