Narrador:
Anahí: -No quería que me vieras así.
Anahí sollozó mientras abrazaba a Alejandro.
Alejandro: -Créme, tampoco quería verte así (suelta una risita). ¿Sabes?, me recuerdas a mi hermana.
Alejandro acarició la espalda de Anahí en pequeños círculos.
Anahí: -¿Tan mal está que también llora por las noches?.
Preguntó Anahí.
Alejandro: -Lo estaba (suelta un suspiro). Ella se suicidó.
Y en un abrir y cerrar de ojos, los papeles se habían invertido, ahora Anahí estaba consolando a Alejandro, había que reconocerlo, ambos tenían una conexión auténtica.
Anahí: -Lo siento mucho.
Anahí acarició el cabello de Alejandro.
Alejandro: -No quiero que te pase lo mismo, ni a ti ni a nadie (abraza a Anahí con fuerza). ¿Quieres contarme qué sucedió?.
Tomó los hombros de Anahí de manera reconfortante y le sonrió levemente.
Anahí: -Me gusta...me gustaba Poncho (sonríe con tristeza). Nunca se lo dije a nadie, y es por eso que él y Dulce están saliendo. Creo que su relación me afectó demasiado, dejé de comer durante un mes, pero ellos nunca lo notaron, ya que estaban muy ocupados besándose y olvidándose de mí.
Suspiró, ¿De verdad le contaría sus problemas a un extraño?.
Anahí: -Luego de unos meses, comencé a salir con un chico, lo quería bastante, hasta que me engañó...o no...bueno, no sé si fue un engaño...No es la gran cosa, hay personas que tienen problemas más graves. Es una tontería, tienes derecho a burlarte si quieres.
Alejandro: -¿Qué dices?.
Alejandro la reprendió y tomó sus manos.
Alejandro: -No es una tontería, simplemente no tenemos talento para lo que es el amor.
Anahí lo miró con ojos cristalinos.
Alejandro: -Oh, ya no llores, te secarás.
Anahí rió, contagiando a Alejandro.
Anahí: -Gracias...por aparecer. Necesitaba a alguien como tú.
Dijo la rubia después de unos segundos de silencio.
Alejandro: -¿Te refieres a guapo?...porque vamos...¿Poncho?...¿Enserio?.
Anahí le pegó juguetonamente en el hombro y negó con una sonrisa. Se sentía bien estar con Alejandro, se sentía bien tener esa conexión especial.
