Dibujos

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La primera vez que Clara les hizo un dibujo fue cuando tenía tan solo un año, y tan solo consistía de garabatos descontrolados sobre el papel con diferentes colores. Se lo mostró sonriente a sus padres, que se la comieron a besos y observaron orgullosos el folio, soltando alguna que otra lágrima. Lo guardaron bien y decidieron pegarlo en un álbum, el primero de muchos.

La segunda vez, Clara salió del portón del colegio corriendo a tirarse a los brazos de sus padres.

—¡Feliz día de los papás!

En la mano traía una cartulina que estaba adornada por tres personas en forma de palitos, dándose la mano. Arriba de cada una ponía: Papá, Clarita, Aita.
Dentro se su mochila había una carta, que su profesora les explicó que había sido redactada por ella pero que evidentemente no había podido escribir, ya que aún no sabía. La leyeron atentamente una vez en casa.

"Hola a mis papis preferidos. Hoy es el día de los papás y les quiero felicitar porque son los mejores del mundo mundial. Me gusta mucho que por las mañanas me despierten con besitos, y cuando lo hace Aita me hace muchas cosquillas con su bigote y siempre me rio mucho. También me encanta escuchar como papá toca la guitarra y el piano y canta muy bien, yo quiero aprender para hacerlo como él, pero me han dicho que cuando sea más mayor me enseñaran. Mis papás se quieren mucho, cuando nos echamos la siesta en el sofá siempre se dan besitos y abracitos, y luego me los dan a mi. Yo también les quiero mucho muchísimo hasta el infinito y más allá, y quiero que sean mis papis para siempre jamás.
Feliz día papis."

Terminaron de leer la carta con un río de lágrimas corriendo por sus mejillas. Clara era una niña muy sensata, que demostraba mucho sus sentimientos, pero ninguno de los dos pensaba que podría pensar así para una niña de cuatro años.
Más tarde ese día, cuando se levanta de la cama después de la siesta y va hasta el salón, Juanjo se levanta corriendo a cogerla para repartir besos por toda su cara.

—Mi niña. Te amo.

Su pelo se revuelve y se ve obligada a apartárselo con sus pequeñas manos de toda su cara, para poder ver con claridad a su padre, que la está mirando con todo el amor del mundo. Rodea su cuello con sus brazos y recuesta la cabeza en su hombro, mientras Juanjo sigue besando su cabeza.
Martin, desde el sofá, mira la escena aún emocionado.

Ya por la noche, mientras están cenando, revelan que tienen regalos para ellos, aunque dijeron que no se iban a gastar mucho, pero aún así querían tener ese detalle.

—¡Ábrelo ya, Aita!

Martin ríe ante la impaciencia de su hija y descubre una cajita aterciopelada que supone que dentro contendría algún tipo de joya, y así es exactamente. Al abrirla revela un collar de plata, que tiene un corazón en el que está tallada la fecha 16-06-2033, el día en que nació Clara.

—Me encanta, muchas gracias.

Ahora es el turno de Juanjo en abrir el suyo. Le hace mucha gracia que el papel de regalo sea de Cenicienta.

—Lo he elegido yo, ¿te gusta? —dice Clara sonriendo.

—Claro que sí, es muy bonito.

Dentro ve una caja bastante parecida a la que había regalado él.

—Oye, no nos habremos comprado lo mismo, ¿no? —pregunta el maño.

—Tu, solo ábrelo.

Juanjo obedece y se encuentra con una pulsera de oro, en la que está escrita "Te quiero papá" y supuso que, al igual que el papel de regalo, era un mensaje que había elegido Clara.

—Estamos conectados hasta para los regalos. Muchas gracias mi vida.

Martin le cogió una mano y dejó un beso en el dorso de esta.

Al terminar de cenar, bañan a Clara y la dejan que esté un rato en la cama de sus padres.

— ¿Sabéis una cosa? —comenzó a hablar la niña. —Hoy en el cole un niño me ha preguntado que por qué estaba pintando a dos chicos. Yo le he dicho que eran mis papás y se ha reído.

Juanjo y Martin se miran y ponen una mueca triste. Preferían mil veces que se lo dijesen a ellos a la cara, antes que su hija tuviese que pasar por ello.

—Pero yo le he explicado que no está mal que dos chicos se casen y sean papás, porque si él tiene una mamá y un papá que se quieren, yo también tengo a papi y aita que se quieren mucho más. —termina de contar la niña.

—Muy bien mi amor, se lo has explicado perfecto. —dice Martin, mirando con ojos aguados y sonrientes a su hija.

Clara de repente hace un puchero y sus padres se desconciertan.

—Es que no me gusta que me diga estas cosas, porque yo no me meto con sus papás y él si y no quiero que se ría más.

Juanjo se apresura para rodear con sus brazos a su hija y acariciarla la espalda para que se tranquilice. Le ha roto el corazón lo que acaba de decir y no promete no empezar a llorar pronto.

—Mi niña, mírame. —pide el maño. —No te tiene que afectar que te digan estas cosas porque sabes que no son verdad. Claro que no importa que no tengas una madre, nosotros te queremos incluso más que una.

Reparte besos por toda su cabeza y Martin coge una de sus pequeñas manos.

— Os quiero mucho papis. —y su respiración se volvió más pesada, hasta quedarse completamente dormida en el pecho de Juanjo.
Sus miradas estaban destrozadas, la confesión de su hija les ha dejado a cuadros.

Miran el reloj. Las 23:59.

—Feliz día del padre, mi amor. —dice el maño con la voz temblorosa.

—Feliz día del padre. Te amo. —responde Martin soltando leves sollozos.

HOLAAAAAAAAA, este cap me parece tan bonito 🥹🥹🥹🥹🥹 he llorado un poquito vale.

espero q os haya gustado muchooooooo.

comentas votad y todo eso que me motiva mucho ☹️☹️🎀

os quieroooo 💖💖

One Shots Juantin | KID FICSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora