LOS CABALLEROS DEL ZODIACO Y TÚ

{1} El inicio de una historia

Narrador Omnisciente

Se dice que la Diosa Athena reencarna cada 200 años para proteger a la Tierra.

Cuando la Tierra está gobernada por el mal, la Diosa Athena la protege con su vida. Aún así, ella tiene unas personas que la protegen, ellos son llamados caballeros. Se encargan de luchar cuerpo a cuerpo, tienen que protegerla, aún si eso significa perder la suya.

Hoy hace 16 años, Athena reencarno otra vez.

Ella es Saori Kido, una jovencita que nació bajo el techo del santuario. Donde el Patriarca quería asesinarla, hubo un caballero que se dio cuenta de eso y la salvó, temiendo lo peor. Lo llamaron traidor, y lo acusaron de atacar a la Diosa.

Él es el caballero dorado de Sagitario, Aioros. Fue él quien entregó su vida por Athena, en la última recta final de su vida, encargó a la pequeña Athena a un señor turista que estaba por ahí.
Cuando esté le prometió que la protegería, su alma pudo estar en paz, y por fin irse al descanso eterno.

Mitsumasa Kido, fue quién se encargó de cuidar a Athena. Este la crío como su nieta, él murio hace un par de años. Pero prometió que a su querida nieta nada malo iba a pasarle.

Al pasar los años unos jóvenes caballeros están preparados para proteger a la Diosa, sabiendo que pueden morir en el intento.

Actualidad

Una pelimorada iba distraída, mientras que su mayordomo le contaba algunos secretos.

—El día de hoy celebramos su cumpleaños número 16, y hay algo muy importante que debe saber. A ese poder que usted posee desde pequeña le llamamos cosmos.

—¿Cosmos?

—Asi es.— Le contesto Tatsumi.— Significa pequeño universo, antes de morir el amo Mitsumasa, me indico que en este día especial debía decírselo. Justo hoy en su cumpleaños número 16. Hace muchos siglos en la antigua Grecia vivia la Diosa Athena, ella mantenía la paz en la Tierra, pero también era la Diosa de la Guerra. Pero a la Diosa Athena no le interesaba la guerra, incluso que dice que la Guerra Santa se libro con el único fin de protegerla a ella.

La señorita Saori no pudiendo ocultar su asombro, abrió mucho sus ojos.

—Existieron jóvenes cuya misión era cuidar a la Diosa Athena, los caballeros.— estás últimas palabras las dijo con admiración.— La Diosa Athena rechazaba el uso de armas, por eso los caballeros usaban armaduras especiales, arriesgaban sus vidas peleando cuerpo a cuerpo. Para ello debían completar un duro entrenamiento, aprendieron técnicas que transformaron su espíritu de pelea en armas. Eso hizo que sus puños desgarracen en cielo, y sus patadas estremecieran la tierra.Rodo eso gracias al enorme poder de su cosmos.

— Entonces, ¿debo ir a entrenar para convertirme en eso?— Le pregunto insegura Saori.

—No, no debe hacer nada.—Le respondió.— Se lo dije porque usted es la reencarnación de Athena.

No le dio tiempo de decir mucho más, porque de repente una enorme explosión se hizo presente frente a ellos. Tatsumi perdió el control sobre el coche, esquivando todas las erupciones de fuego posibles. Pero no pudiendo esquivar a un choche acabo chocando concha el metal del puente.

—Señorita Saori, señorita Saori, ¿está bien?¡Señorita responda!— Gritaba ya un desesperado Tatsumi.

Saori no pudo responder ya que un caballero llegó hacia el coche, y tomo del cuello a Tatsumi.

—¡Señorita Saori, salga de aquí!¡Salga del auto!— Le decía Tatsumi.

Saori salió del coche, pero tropezó cuando esté explotó.