La perfecta obsesión de un mafioso (Editando)

Capítulo 26

Araceli Romero

Mando a Jonas y a Teo que vayan primero a New York a por unos documentos

Dichos documentos dejan a Samuel sin el coche que se compró hace tres días. Cuyo coche le costó la vida, él vendió sus relojes, cinturones, zapatos y otros

—¿Estas segura de esto?

Me pregunta Carolina mientras los estilistas entran a mi habitación

—Por supuesto. Esos inútiles me delataron ¿Que esperas que haga?

—Ok, tú mandas

Los estilistas me maquillan y me peinan mientras que Caro busca un vestido acorde para la ocasión

—¿Que pasa con Bruno?—Le pregunto

—No sé quién es ese

—Es tu comprometido ¿Que te hizo?

—Sabes que estaba mirando a Catalina y luego me dejó desnuda y con ganas en la cama

—Carolina...

—Araceli—Federico entra a la habitación—¿Cuánto va a durar esto? Alberto ya está en el aeropuerto, nos está esperando

—Bajo dentro de quince minutos

—Ok ¡Ah! Y nada que sea provocador

Se marcha

—¿Que se creen? Nosotras tenemos que lucirnos—Se queja Carolina—No somos de sus propiedades

El estilista no me deja hablar ya que me está retocando los labios con un hermoso labial carmesí

—¿Este?

Estoy de espaldas al espejo y de frente a Carolina. Caro me enseña un vestido negro largo con lentejuelas

—No estoy de luto

—Ok

Sigue buscando en el armario

—¿Morado?

—¿Que te parece un rojo vino?

—El único vestido rojo vino que tienes aquí tiene escote en V y es ceñido al cuerpo osea que hace resaltar tus curvas

—Ese es perfecto

—¿Quieres que el señor Romero le saque los ojos a todos?

Pregunta el estilista (gey) que me está peinando

—Esa no es mi intención

—Pero lo provocarás luciendo ese vestido

—Quiero que Fabiola se quede chiquita a mi lado

—Señorita Romero, con o sin ese vestido, dejas chiquita a cualquier mujer que se pose a tu lado. Eres tan bella como la Luna y tus hermanas son tan bellas como las estrellas. Dímelo a mí que siempre las veo en las redes sociales y las admiro