Amor de Madre

Capitulo 11

                   N/A
BUENOS ES PERO QUE LES GUSTE ESTE CAPÍTULO COMO, A MI LA LEI COMO DOS VECES PARA VER COMO IBA QUEDANDO, QUE ESTA EL FINAL TERMINE LLORANDO 😭 Y EN POCO SABRAN ¿POR QUE?

             El dolor de una madre

— Kagome […] será mejor que acepte el comenío del abogado contrario, le ha dado [hum] por desgracia hay muy poca posibilidad que ganemos.

— Pe...ro yo he mostrado mi evidencia.

— ja...—Se escuchó una risa, que dejo plasmados a todos los que estaban sentados en la mesa — ¿Cuál evidencia, solo espero que no sea tu estúpido papelito? […] Ese papel no muestra nada, solo te deja en evidencia que no ¿Dejastes que las autoridades correspondientes hicieran su trabajo? En pocas palabras eres culpable de secuestro ha un menor de edad.

— ¡No! […] No pueden acusarme de algo que yo no hice.

— Tu decides ahora, llegamos a un acuerdo tu y yo en estos momentos […] oh continuamos con la demanda, tu decides.

— ¿Por lo menos quiero saber, que carajos voy a firmar?

Contesto kagome mirando, al hombre de ojos fríos frente de ella.

El abogado contrario, le ofreció un documento ¿Dónde relactaba las condiciones que tenía que cumplir la chica de ojos azules al piel de la letra.

Y una de ellas era que; “ Tenía que devolver al pequeño niño, con su verdadero padre” la otra condición era que ella; “No podia hacercarse al menor por lo menos por un tiempo” mientas que el menor se adaptaba a su nuevo entorno.

Y por último era que Kagome tenía prohibido llamar al menor como su «hijo» y la última de todas era que ella renunciaba por completo a la custodia del menor para dársela por completo a su verdadero padre.

Era un simple documento de dos hojas, que se haría válido en el momento que ella firmara, aceptando aquel convenio.

Kagome estaba indecisa en firmar aquel documento, ella no quería separarse de
su hijo ese pequeño que era y siempre sería su verdadero hijo.

Ella lo supo desde el momento, que lo cargo en su regazo aquel hombre nunca lo entendería, aquel lazo que creció desde aquel día lluvioso.

Kagome con todo el dolor de su alma firmo aquel documento, rechazando el último punto de aquel contrato cambiando lo por otra más justa para ella.

Y la cuál era:

«En el caso de su hijo, la buscará ella estaría para el»

Cuando sesshomaru leyó aquella parte del contrato, miro a la chica de ojos azules, simplemente no tenía nada que decir ella había aceptado sus demás demandas ¿Por qué lo que el terminó aceptando lo que ella pedía?

Después de firmar, aquel documento dos dos abogados estaban ¿Por marcharse? Kagome también quería irse, no soportaba un minuto más estar frente a frente aquel hombre.

— ¿Dime si puedes quedarte un minuto más?

Kagome no quería hacerlo, pero tampoco pretendía ser descortés con el.

— […] Digame de ¿Que quiere hablar conmigo? Solo espero que sea rápido, tengo a un hijo que me separa es casa.

— Te recuerdo que ese niño, es mi hijo mujer.

— Tal vez sea su «hijo», pero yo he estado para el, desde el momento que lo encontré.

Kagome tomo su bolso y salió del restaurante furiosa, y a la vez triste sino fuera ¿Por qué estaba tanta gente ahí afuera del restaurante? Su hubiera derrumbado por la tristeza.

Estés dolor que sentía en su corazón era más doloroso; a lo que había sentido, cuando su familia había fallecido. Tener que entregar a su hijo, al padre biológico de su hijo, tener que separarse de su «adorado hijo» era el peor de los sufrimientos.

Camino por un rato por las calles, mirada  como la gente pasaba delante de ella. Sonreían las familias que caminaban del otro lado de la calle o estaban en  las tiendas de comida, jugando o riéndose.

Kagome se preguntaba ¿Cómo era posible que el destino fuera tal cruel, con ella arrebatándole lo más importante para ella? Primeros sus padres y a su hermano, ahora le quiere quitar por segunda vez a su hijo a su pequeño Kairi.

— Cuando un corazón de una madre sufre por un hijo, es el peor de los sufrimientos [...] ¿No lo crees pequeña?

Se escucho una, voz que provenía detrás de ella.

— Yo bueno […] yo no puedo mentirle, ¿Quisiera llorar y gritarle a kamisama? Y preguntarle ¿Por qué me trata así? Ya me quito a mis padres y a mi hermano Sota.

— A veces la vida es dura pequeña […] pero kamisama nunca nos manda más de lo que podemos tolerar, «el Dolor de una madre» es más grande que cualquier otro sentimiento. Y más si ese hijo llegó para sanar heridas del pasado.

— Yo....

— Llora pequeña, no dejes que ese sentimiento te desgarre por dentro yo estaré aquí para consolar tu corazón.

Kagome dejo salir aquella lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos azules, la mujer de cabellos negros y ojos verdes la abrazaba, consolando la como una madre a su hija.

— Recuerda que yo siempre cuidaré de mis hijos, nunca te daré mas de lo que te puedo dar. Todo volverá a ser como debe ser, recuerda esto siempre mi niña hermosa.

Cuando kagome abrió los ojos estaba sentada bajo de un árbol de cerezo, las flores caían frente de ella. Volteo por todo los lados tratando de encontrar aquella mujer, que la había consolado.

Pero no la vio por ningún lado, volvió a caminar para salir de aquel parque, en el cuál ella estaba.

Por una extraña razón estaba Serca de su casa, no comprendía como había llegado a su casa. Al entrar miro que todo estaba solitario al parecer todos estaban en su habitaciones, subió las escaleras hasta llegar a la habitación de su pequeño Kairi.

Abrió un poco la puerta, para escuchar lo que pedía el pequeño niño; — Por favor kamisama, cuida de mi mamita, de mi tío Naraku, de mi tía Sango y del tio Miroku.
Y también quiero pedirte, que mamá deje de escuchar mis oraciones.

[…]

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A... por poco olvidó darles las gracias por darle todo el apoyo a mi historia.