La vida de Zenitsu era realmente monótona, su hermano mayor Kaigaku se había ido a la capital a estudiar la universidad, dejándole solo en su pequeña casa. No pasó mucho tiempo cuando una oferta universitaria de intercambio le llegó.
La simple idea...
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Sanemi estaba acostado en su cama, mirando el techo, meditando en si estaba bien lo que había hecho con Nezuko, sobretodo porque hubo nudes de ambas partes.
El albino se fue a la cocina de la mansión, se sirvió un trago de Whisky puro, bebió un sorbo mientras pensaba en ese asunto. Era un tanto absurdo, ¿por qué le mintió?, ellos podrían haber sido amigos solamente.
Shinazugawa sacó un cigarrillo de la caja, lo encendió, inhaló lo más profundo que pudo, de sus labios salió una gran cantidad de humo.
— Demonios... — susurró mirando el techo —, no quiero ser un enfermito...pero, ella ya va a ser mayor de edad, pero, igual está mal.
Puso una mano en su cabeza, pensando en que hacer, subió las escaleras, se miró en el espejo, lo que estaba hecho, ya estaba, no había forma de borrar el pasado, no existía manera de olvidar todo.
— Ni modo — comentó la él mismo, expulsando más humo —, tocó parecer loquito del centro.
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Nezuko estaba viendo videos en Youtube, aún extrañaba hablar con Sanemi, había tenido una larga charla con Tanjiro sobre que estaba mal mentir, ocultar y sobretodo, ser fácil carnada para personas más adultas, que había tenido suerte de que Sanemi no era un loco que la hubiera querido vender o matar.
Suspiró melancólica, él era el hombre de sus sueños, y parece que lo invocó con el pensamiento.
"Sanemi Bebé" apareció en la barra de notificaciones, le había escrito, Nezuko saltó de la cama al ver la notificación, dando saltos nerviosa.
— Él, él — susurró abriendo el mensaje, se tapó la boca al ver el contenido, la estaba invitando a un café para charlar —, ¿y si...ya no me quiere ver más nunca?
Esa era una posibilidad, no sabía que le diría Sanemi en dicha reunión.
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Zenitsu estaba en la universidad, mecía su pierna sin parar, Uzui le dió una tarjeta para que comprara lo que quisiera, ya le envío dinero a Kaigaku para seguir el tratamiento, claro que está recibiendo muchas preguntas por parte de su hermano.
¿Debería...prepararse para pagar las cosas que Uzui le daba?, sabía que Uzui seguramente le pediría sexo a cambio, ah, que tonto, todo esto se trata de sexo, desde el primer momento.
Su piel estaba algo seca, debía lucir lo mejor posible para mantener el interés de Uzui en él, y al igual que Suma, sacar todo el provecho posible de la situación.
Si, necesitaba de Suma, sin duda alguna, tenía mucha suerte de ser amigo de alguien del medio y que sobretodo, conocía los gustos sexuales de Uzui.
Salió de sus pensamientos en el instante que sintió la mirada pesada de Makio en su espalda, giró su cabeza lentamente, admirando el rostro fruncido de la azabache con mechones rubios.
Zenitsu volvió a su postura inicial, debía mantener la postura recta, demostrar que valía la pena y no darle dolores de cabeza a Tengen por peleas innecesarias.
Al llegar la hora del almuerzo, Agatsuma fue hasta la casa de Suma en Uber, era algo extraño para él gastar dinero sin preocupaciones. A penas llegó, tocó el timbre, la puerta se abrió con una suma llena de crema facial en el rostro.
— Hola Zenitsu, disculpa que te reciba con estos trapos — comentó mientras le mostraba sus manos, que estaban dentro de unas bolsas de mascarilla.
— No te preocupes Suma, disculpa por no avisar que venía — se disculpó, ella negó.
— No hay problema chiquitín, pasa, pasa — se hizo a un lado —, así me ayudas a acabar el almuerzo, no he comido nada y ya me estoy muriendo de hambre.
— ¿No has comido nada? — indagó, ella negó lentamente mientras se acerca a la sala.
— Tengen viene a mi casa hoy, así que, tengo que lucir perfecta — comentó Suma sentandose en el sofá, Zenitsu cerró la puerta con cuidado.
— ¿No es mejor mandar a venir algo?, creo que nos sale mejor — los ojos de Suma brillaron ante la idea, asintió tan rápido que la mascarilla casi se le cae.
— ¡Es una excelente idea! — afirmó.
— Lo pediré yo, a cambio, quiero información de como agradarle sexualmente a Tengen — Zenitsu se sentó en el suelo mirándola, atento a su explicación, Suma comenzó a reirse.
— Así no funcionan las cosas con Tengen, con cada persona es diferente, no busca el mismo patrón de juegos, por ejemplo...— inhaló antes de hablar —, conmigo es más soft, mas...como una chica super mimada, con Hinatsuru es más de cuerdas, con Makio y Daki es mas masoquismo, creo que depende con quien lo haga y que te guste.
Zenitsu se quedó en blanco, bajó la cabeza y se rascó la nuca mientras que pedía la comida en la aplicación del delivery.
— Bueno...yo...— sus mejillas estaban rojas, Suma alzó una ceja esperando su respuesta —, yo soy... virgen.
Ambos se miraron fijamente, Suma asintió lentamente con una risita curiosa en la cara.
— Vaya...yo pensé que ya habías hecho el cuchicuchi, pero, eso es una tecla que debes tocar con Tengen — respondió Suma alzandose de hombros, Zenitsu concordó.
