47. Voces...

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Y como ya saben lo bonito no dura para Amelí pues en su vida ocurrió algo que aumento su miedo y la hizo volver a caer.

-Amelí ¿te pasa algo? *pregunta el profesor de la universidad*

-*estoy recostada sobre el puesto con la mano en el pecho tratando de parar el dolor y poder respirar* tranquilo profe no es nada *me levanto*

-estas muy pálida Amelí, vamos a enfermería

-no tranquilo es algo que me pasa siempre, ya lo controlo

-vamos y te tomas un agua por lo menos o llamas a tus padres *me toma del brazo y lo sigo*

En enfermería llaman a mi mamá, y ella manda a un tío a recogerme para que me lleven a casa ya que ella no puede y mi papá esta fuera de la ciudad, me siento mal y esa voz esta por ahí hablándome, diciendo que moriré hoy con mis propias manos, no la soporto.

Mi tio me deja en la casa, estoy sola y esa voz sigue llamándome, tengo miedo, no se que hacer, asi que coloco música a todo volumen para tratar de tapar las voces pero resulta ser peor.

-¿Por qué no se van? *empiezo a hablar con quien quiera que sea*

Esas voces me responden...

-no lo haremos, nos tendrás el resto de tu vida, acaso no te ves? Estas destruida, deberías morir *se ríen a carcajadas* toma un cuchillo de una buena vez y clávatelo.

-No lo hare, maldita sea VAYANSE! *estoy acurrucada en un rincón llorando* por favor déjenme, ¿qué quieren de mí?

-que mueras, queremos tu alma *no paran de reírse*

-POR FAVOR NOOO! NO HARE ESO! *tapo mis oídos y trato de calmarme* no ganaran

-ESO CREES? Nosotras siempre ganamos, muérete, muérete MUERETEEE!

-púdranse ustedes! *salgo de mi cuarto y comienzo a beber lo que encuentro, tal vez ebria no piense en esas voces*

Y si lo logro, no del todo pero dejaron de gritarle, en ese momento se dio cuenta que era algo más, no solo voces, esto era de verdad y estaba muy asustada, al rato salió con Sam a tomar algo, habían quedado el día anterior, así que eso le serviría mucho para olvidar lo que paso, fueron a comer y hablaron, se sentía idiota por ir ebria pero también quería salir a algún lado y mejor acompañada de la única persona con la que hablaba.

Al siguiente día... ellas ganaron... no soporto escucharlas y se lastimo para que pararan de hablar, esto ya era serio pero no tenía nadie con quien hablarlo.

*1 mes después*

Formen grupos de trabajos y en 2 semanas tienen exposición frente a todos los estudiantes de la universidad *formamos grupos*

-Bueno Amelí que te parece si tocas algo ese dia? Nos daría muchos puntos

-aamm frente a todos?

-pues si

-esta bien preparare algo

-genial

..................

Bueno entonces empezare a llamar a los grupos y me dicen su labor.

*llamo a cada uno hasta que llego a mi*

-Ameli? ...

-sí señor, aquí

-¿qué vas a hacer?

-*responde John por mi* ella va a tocar algo ese día*

-genial, ¿qué cantaras?

-¿cantar?

-pues y entonces ¿quién? Tú cantas bonito, dale

-pero ni siquiera me ha escuchado cantar *todos reímos* me da pena profesor

-*empiezan todos en la clase a animarme* ¿ves? Cantas bien, hazlo *y empieza a anotar que cantare*

-aam pues bueno... *¿que acabo de hacer? –pienso*

De esa manera ella empezó a sentirse más segura de lo que hacía, su música, y aunque tuviera mucho miedo de cantar por primera vez en público y como solista estaba decidida a hacerlo, algún día tenía que hacerlo, y salió totalmente bien, se subió al escenario con su guitarra y con los nervios de punta, no miraba al público y no reconocía casi su voz al hablar por el micrófono presentándose, era de noche, y todos la estaban mirando, así que opto por mirar abajo un momento, respirar y comenzar, fue para ella el comienzo de algo nuevo y seguro, olvido todo y canto sin querer parar, sintió esa bonita felicidad que pasaba por su cuerpo al subirse a un escenario a hacer lo que más le gusta, para recibir aplausos por hacerlo y creía que podía hacer lo que quisiera de ahora en adelante, ese fue un paso importante para ella y para su vida, dejo su miedo del público a un lado y eso la hizo feliz.

Ahora todo era como si fuera una nueva vida, no un comienzo en sí pero algo por el estilo, su música, sus sueños, su estudio, esas cosas cambiaban para bien, no importaba que las voces siguieran hay o las veces que ganaran o las veces que lloraba por los insultos, eso a veces no le importaba porque quería cambiar un poco, así todo pareciera hundirse más...

Bueeeenoooo hermosos y hermosas personitas que leen esta historia, he regresadooooo! (ya era hora) se que me quieren asesinar pero entiendan, estuve muy ocupada :c lo siento mucho.

De esta noche a mañana escribo el final J espero no decepcionarlos, si quieren que ocurra algo para el final háganmelo sabers J

Gracias por las estrellitas y comentarios, y a los lectores fantasma :v los quiero a todos <3


AmelíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora