××Los Herederos Al Trono××

|capítulo 14|

Llegando a la habitación yevierly se encontró con la inesperada visita de su madre y esposo en sus aposentos, Evier quién mantenía una sonrisa que se podría interpretar  como felicidad miraba a la princesa, a un rincón su dama de confianza y al otro el maestre y su aprendiz.

—A que se debe dicha reunión—dijo caminando hacia  su dama mirándole en busca de ayuda ante cualquier cosa.

—los maestres nos han dado la buena noticia— dijo evier con notable alegría en su voz.

La mujer le hizo saber a la princesa que no ha dicho nada y que todo hiba bien hasta ahora.

—hija el primogénito de evier ya hace en tu vientre los dieses son buenos.— exclamó la reina con dicha alegría.

Yevierly volteó corriendo su mirada al maestre y aprendiz con una sonrisa de falsedad y rencor. obviamente esto era obra de ellos.

—tan rápido se han dado cuanta esperaba darles yo la noticia.

—¿pero donde estabas?—pregunto evier.

—cabalgando—respondió pidiendo a leana servirle vino.

—¿cabalgando? ¿pero que pasa contigo? ¡lo que nos ha costado y parece no importarte perderlo!—dijo evier con enojó agarró de los brazos a yevierly apretando con fuerza su agarre.

—Evier—menciono su nombre nelizor.

Su madre como hermano lo miraron

—Nelizor, hermano pronto nacerá mi primogénito—soltó el cabellos dorados con una sonrisa caminando a su hermano.

Nelizor miraba a su hermano fijamente.

—¿pasa algo nelizor?—pregunto la reina aneeliza.

—felicidades, nada madre, nada.

—hija debemos darle la noticia a tú padre, vamos cariño.

Leana sostenía la copa de vino y en un intento de yevierly por sostenerla cayó al piso.

—¿princesa está bien?—pregunto con preocupación leana.

—si... no.

Yevierly cayó de igual forma pero en los brazos de su dama de confianza esta la sostuvo con fuerza evitando dejarla caer.

—¡Maestres hagan algo!—se escuchó por parte de evier.

—¡Están sordos o ciegos miren que le pasa a mi hermana!—dijo nelizor haciendo que el maestre lok pidiera a su aprendiz ayudarle con la princesa y dejarla en la cama.

—no puede perder al niño que lleva en su vientre—dijo la reina al maestre.

—un embarazo puede surgir nuevamente es mi hermana quién importa en estos momentos.— dijo nelizor en respuesta a su madre.

El maestre pidió a todos salir de la habitación a excepción de leana y su aprendiz.

Afuera evier caminaba de un lado a otro y la reina prefirió ir a sus aposentos con la excusa de estar de nervios que podría desmayar en cualquier momento, Nelizor evitó ser deseducado a la hora de ver a su madre marcharse sumergido en sus propios pensamientos como recuerdos que corrían dentro de su cabeza.

—¿Piensas que podría?—pregunto evier sacando a su hermano de sus pensamientos.

—te equivocas.

Ya era medianoche y la única respuesta que recibieron por el maestre fue que la princesa se adaptaba a su periodo de gestación. La princesa yevierly si había abierto sus ojos pero pidió al maestre no ser informado a su familia, sin embargo asegurarles que estaba bien.