××Los Herederos Al Trono××

|capitulo 1|

"La familia Real" La familia trajorfye" los más poderosos y los reyes de paradys".

El rey espera impaciente afuera de los aposentos de su esposa la reina Aneeliza , quién se encuentra en un parto, su tercer parto con este año. La mano del rey le acompaña para que no pierda la cordura ya que bien sabido es que si algo teme el rey Evier es perder a su esposa en esa posición dando a luz a un niño pues es algo que nunca se perdonaría ya que sería el fruto de su ser quién arrebatará la vida de la mujer que tanto ama.
Mientras tanto los gritos de dolor de la reina no dejan de escucharse hasta que una mujer exclama alegre—¡ya nació es una niña!—las demás parteras abandonan la preocupación pues la reina está estable y su princesa también.

La reina al escuchar a la mujer a turra su entrecejo diciendo—¿una niña? ¿de que me sirve una niña? yo necesito dar a luz a herederos para la dinastia de nuestra casa, la casa tra..—se interrumpe así misma al sentir el mismo dolor de parto—¿pero que esto?— pregunta a las parteras. Estas rápido observan que otro bebé está saliendo de adentro de la reina—¡Mi reina puje fuerte los dioses la bendicen!—dice una mujer ayudando con el siguiente parto.

Afuera al rey le detienen la entrada a los aposentos de su esposa avisándole los guardias de otro parto. El rey se sorprende haciendo que el miedo invada su cuerpo nuevamente.

La partera corta el hilo del ombligo del bebé mirando con regocijo a un heredero más al trono, así es era un varón. los dioses volvían a bendecir a la casa por tercera vez; La reina ordenó a las parteras traer al bebé a sus brazos las mujeres limpiaron al príncipe envolviéndolo en  sábanas doradas como el color de la casa ... del reinado. Una vez el príncipe hacia en los brazos de la reina está acarició a su hijo pero algo la hizo aturar su entrecejo nuevamente acompañado de un grito desesperado —¡Mi hijo no respira!— dijo mirando a las mujeres—¡Mi hijo hagan algo!—les ordenó desesperada salvar a su varón, la princesa que tambien recien nacida hacía en los brazos de una de las mujeres al escuchar los gritos desconsolados de su madre empezó a llorar.

El rey en ese momento entro confundido al escuchar los mismos gritos, miró a las mujeres buscando una respuesta y se dirigió a su esposa quién lloraba muy dolida—¡Mi rey nuestro príncipe está muerto!—decía la reina una y otra vez. El rey beso la frente de aneeliza y con fuerza apreta su mano dando fuerzas a su esposa.

Las parteras hicieron todo lo que pudieron pero el príncipe recién nacido había fallecido.
El rey observo distante al bebé que hacía en los brazos de una de las mujeres envuelta en sábanas rojas también observo a su varón muerto envuelto en sábanas doradas agradeció y renegó a los dioses ... agradeció y renegó a los dioses su varón muerto y una hembra dejaron en su lugar.

El reinado de paradys estaba de duelo a la memoria de unos de sus herederos, el príncipe fallecido. Mientras que la otra mitad del reino festejaban por la primera mujer heredera al trono y la casa trajorfye el reinado de paradys. El rey mismo se sentía  feliz por el nacimiento de su primer princesa la primera hereda de la casa y si abandonaba este sentimiento era por su esposa quién no dejaba de sentir rabia y dolor por lo sucedido llegando a decir— prefiero que ella hubiese muerto y no nuestro príncipe—No era de ocultarse el resentimiento que la reina aneeliza le tenía a su hija llamada Yevierly , La princesa Yevierly su nombre daba honores a su padre a su rey; Era solo una bebé pero su madre ya la había condenado toda su vida por la muerte de su hermano gemelo.

Después de veinte días la princesa Yevierly era presentada al pueblo a todo el reinado como la primera hereda a la casa las trompetas sonaban y los gritos llenos de regocijo por la gente inundaban el castillo.
La reina al lado del rey con su dos príncipes el primogénito y el segundo llamados con los nombres de "Nelizor y Evier ll trajorfye. Presenciaban alabar sus nombres su casa .. el rey sostenía a la princesa con sonrisa alegre a su derecha los padres del rey y la reina a su izquierda la mano y consejeros del rey también sus guardias más leales, no había duda que el reino era y seguiría próspero por cientos y miles de años más.