Perfecto Touchdown

12. DECLARACIÓN

GISELLE

Gracias a todas las cosas que me habían pasado —era claro mi sarcasmo— había olvidado por un momento que Chris estaría cumpliendo años el viernes, siendo un buen día para salir a festejarle durante la noche en cuanto terminase mi turno de trabajo.

Sabía que él se negaría para no ser una molestia, pero también sabía que, si no le hacía nada, se enojaría.

En fin, tenía todo planeado junto a otra personita.

Liza vendría ese día con los chicos para festejar y organizarnos bien de lo que haríamos con poco dinero, al menos en mi caso.

Mis pensamientos con respecto a Ashton no me dejaban tranquila, aun podía sentir calor de solo imaginármelo acercarse hacía a mi sin camisa y sonriéndome de esa manera tan sensual que me causo más de un suspiro. Debía borrar eso de mi mente, más ahora que era probable que me lo encontrase en el pasillo y si me causaba más emociones podría darse cuenta que estoy locamente atraída por él.

Y no sería nada bueno de eso.

Deje de pensarlo al decidir por ir a la biblioteca durante la hora libre que tenía, al menos eso pensaba hacer cuando me cruce en el pasillo y si no fuera porque me fije a tiempo hubiese chocado con el profesor Charlie y tirado su cajita con dos cafés que llevaba en sus manos.

—Por los cielos... —dije deteniéndome en seco y mirándolo conmocionada.

Él se miraba de la misma manera en cuanto se dio cuenta de quien era.

—Perdone, ando un poco aturdida. —comente echándome la culpa, aunque sabía que no la tenía, pero me estaba acostumbrando a ser más humildad al ver que solo de esa manera agrado a la gente.

Pero costaba.

—No te preocupes. —respondió dejando ver una mediana sonrisa—. En realidad, yo no me he fijado.

—Bueno. —me encogí de hombros—. Ambos tenemos culpa.

—Supongo que sí.

Por un momento pensé que no diría nada más, así que estaba decidida a irme a pesar que estoy atrasada con el intento de agradarle, el tiempo se me estaba acortando y no había hecho mucho que solo aturdir a Susan.

Pero Charlie decidió por hablar de nuevo.

—Me entere que te desmayaste en los pasillos, ¿Cómo estás?

Hice todo lo posible de no blanquear los ojos al estar cansada de que me mencionaran ese incidente y más si este me recordaba que estuve en los brazos de Ashton y que me arrepentía completamente que no estuviese consciente para sentir su cuerpo a mi lado, pero no podía enojarme ahora cuando él solo estaba preguntando por mi estado.

—Todo bien, gracias por preguntar. —conteste dejando ver una mediana sonrisa—. No era la gran cosa.

—En todo caso, me alegra verte bien.

—Gracias... ¿y usted como esta? —pregunte al no querer ser grosera y solo ser yo la protagonista de la conversación.

Él suspiro hondo.

—Estoy bien, solo que tengo que lidiar con algunos cambios que habrá en la universidad. —respondió poco después.

—¿En serio? —me vi interesada por la situación—. ¿Sucede algo?

Hizo mala cara como si le estresase hablar del tema.

—Es algo que ustedes los alumnos lo sabrán después, solo es cuestión de tiempo. —respondió con tranquilidad.