Entre la nave nodriza y el silencio que abundaba en la Sala de comunicación, donde tú y Soundwave estaban en un silencio Sepulcral, un sueño o una tumba, tanto silencio que te hizo dormir como un bebe, mientras las manos metálicas de Soundwave presionaban botones con una elegancia.
Soundwave te miraba por unos momentos, pero después perdió el interés, siguió codificando códigos concentradamente, mientras que tú estabas roncando como motor de auto.
Al pasar los 15 minutos, te diste vuelta y te caíste por el desnivel que tenía la mesa de computador, despertándote por el golpe y el frío suelo de aquella mesa, Soundwave no te tomó en cuenta, solo escuchaba tus molestos ronquidos.
—que. . . ¿Qué paso? — dijiste levantándote de golpe — Uuuf.... Que frío... — te abrazaste a ti misma.
Miraste el alrededor con cautela, todo lo que veías era nuevo para ti. Más grande, oscuro y sobre todo, lo más que te impacto fue que todo era metal, pensaste varias veces como llegaste, y como los alíen tomaron a una humana cualquiera sin ninguna características que se pudiera usar, solo sabias cocinar.
Te pusiste de pie, estabas dando la espalda a Soundwave, aun no notabas su presencia, pusiste una mano en tu mentón y comenzase a analizar las razones del porque te capturaron, pero eran ideas sin un contexto o sin fundamento, lo único que podías pensar era en Rafael y tu decepción por irse a otro lugar abandonándote en el colegio, eso te frustró mucho.
Suspiraste y al darte vuelta viste una mano metálica, delgada y fina, venía directamente hacia a ti, y te agarro desde tu prenda, separando tus pies del suelo.
Te alteraste y trataste de romper el agarre, querías escapar, parecidas una prensa colgada recién lavada. Al girar notas te un visor negro, no sabía si te estaba mirando o no, pero, dabas vueltas lentamente como helicóptero, sentías la presión de una mirada, pero no visualizabas los ojos.
Soundwave te dejo frente a la computadora, te miro y en su visor negro mostro la imagen de tres jóvenes, Jack, Miko y Rafael.
Reconociste las caras — sí, se quiénes son esos niños, ¿por qué me muestras esa imagen? — dedujiste, pero después recalcarte— no puedes hablar? —
Soundwave no dijo nada. Y mostró otra imagen, Rafael subiendo a la ambulancia.
Dedujiste la imagen— así es... Rafael subió a esa ambulancia, ¿qué tiene de malo? — tu cabeza daba vueltas todavía no podías creer que hablabas con un ser metálico, bueno deduciendo que decir, el no te decía nada y debías deducir sus intenciones incluido interpretar.
Te tocaste la frente tratando de analizar lo que estaba sucediendo, todo iba muy rápido no entendías que quería el contigo, solo te mostraba dos imágenes y de pronto él te mostro otra, donde el camaro amarillo y una motocicleta aparecían transformados.
—me estas... Bueno, mostrando, ¡¿que esos dos autos sin choferes eran alíen como tú?!, entonces tenía razón todo este tiempo? ¡¿Que Rafael me estaba mintiendo diciendo que iba con sus amigos a hacer un trabajo de ciencia, pero resulta que estaba con ellos en su base bajo la protección de ellos y él no me lo dijo?! — te alteraste, enojaste y te paseas de un lado a otro hablando.
Soundwave te miro como dabas vueltas de derecha a izquierda balbuceando, tenías razón en lo que decías no hacía falta palabras o sonidos, ya sabias la "verdad" o algo de ella.
— demonios, debí preguntarle ese mismo día antes de que me trajeran a esta... ¡Esta... Pocilga! — te enojaste y gritaste.
Soundwave se sorprendió un poco pero no demostró emoción, nuevamente te tomo de tu prenda y te llevo a la sala de control principal, la cabina de mando.
ESTÁS LEYENDO
Vínculos de Metal, Latidos de un Alma (Soundwave x lector)
Romance(T/x), es una joven de 23 años apasionada por la gastronomía. A pesar de disfrutar de su carrera, sus oídos sensibles contrastan con su amor por la tranquilidad. Cuando decide tomar unas vacaciones en una ciudad lejana, no imagina que se verá envuel...