[1.35] Genio académico pobre x Segunda generación con gustos peculiares
¿QUÉ PASARÍA SI... Shen Zi transmigrara a la época de estudiante de Xie Yu?
"Mis padres no están, nadie vendrá a sacarme de aquí."
"¿Pagar una multa? No tengo dinero."
"¿Detención? Pues que me detengan, no pienso disculparme con esos imbéciles."
Xie Yu estaba sentado en la sala de interrogatorios. Cuando golpeó a alguien, su puño rozó la cadena de su mochila y le arrancó un pedazo de piel del tamaño de una moneda. La hemorragia ya se había detenido, y una gruesa costra de sangre negra y roja cubría la herida.
El funcionario, con dolor de cabeza, tecleaba en su computadora: "Por tu uniforme, pareces un estudiante de secundaria, ¿no? Tenemos que informar a tus padres sobre esto..."
"Ya te dije, no tengo padres."
Xie Yu lo interrumpió con un tono rígido. Su cabello, aparentemente sin cortar durante mucho tiempo, caía sobre sus ojos, que ahora miraban fijamente al funcionario con una expresión sombría.
"De acuerdo, entonces no tengo otra opción más que emitir tu orden de detención..."
El funcionario suspiró, registrando los datos en su computadora frente a Xie Yu. Ninguno de los dos habló. La pequeña sala de interrogatorios quedó en silencio, interrumpido solo por el sonido de las teclas.
Clac, clac, clac, clac.
Xie Yu, inquieto, pateaba el suelo de vez en cuando.
No sabía qué estaba escribiendo el funcionario en el informe, si lo acusaba de acosar a sus compañeros, de violar las normas o de ser insubordinado y de carácter obstinado. En cualquier caso, no serían cosas buenas.
El funcionario continuaba tecleando de forma mecánica. No sabía cuánto tiempo había pasado cuando, de repente, se detuvo y luego hizo doble clic en la pantalla, como para confirmar algo.
Xie Yu se frotó los pantalones del uniforme y se puso de pie sin preocuparse: "¿Listo? ¿Adónde me llevan para la detención?"
Prefería entrar de una vez en lugar de ser observado con sorpresa y lástima.
"No, espera un momento. Déjame verificar, alguien ha venido a sacarte."
"¿Alguien?" Xie Yu se rió con desdén y se volvió a sentar. "Debe ser un error del sistema. No tengo padres."
El funcionario tecleó un par de veces: "No, de verdad, hay alguien. Sal y verás. Han pagado tu multa y te están esperando en el vestíbulo."
Xie Yu pensó que era una broma o que habían confundido su nombre. Se levantó: "¿Quién me ha sacado?"
El funcionario señaló la pantalla: "Déjame ver... oh, se llama Shen Zi."
Xie Yu vio a Shen Zi en el vestíbulo de la oficina.
Cuando salió, el hombre, cuyo nombre sonaba tan agradable, estaba revisando los documentos de la fianza. Llevaba un traje, unas gafas de montura de plata de estilo antiguo y su rostro irradiaba nobleza y elegancia. No parecía alguien que estuviera en un bullicioso vestíbulo revisando documentos de fianza, sino más bien un antiguo maestro en un patio lleno de bananos leyendo poesía.
Xie Yu no conocía a alguien así. Su época de secundaria era como una masa de agua sucia en una alcantarilla, sin ningún vínculo con el hombre elegantemente vestido frente a él.
Xie Yu pensó: seguro que se han equivocado.
Agarró su mochila, dispuesto a volver y aclarar con el funcionario que no conocía a ese tal Shen Zi, que no había venido por él y que apresuraran el proceso de detención. No tenía ganas de perder el tiempo.
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Los NPC de novelas abusivas no dan buenos resultados
RomanceEn el mundo de las novelas, existe un género muy común conocido por su tendencia al abuso del protagonista. En estas historias, el protagonista sufre torturas constantes, convirtiéndose en poco más que una sombra de su yo anterior. Intentan mantener...