[3.90] WHAT IF...? (S/E)

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[3.90] Médico veterinario frio v/s Duque que puede transformarse en gato

¿QUÉ PASARÍA SI... Imur viaja a la época moderna?

Lewis estuvo encerrado medio día, hasta que finalmente lo liberaron.

Salió de ahí completamente confundido, regresó a su habitación igual de desconcertado y, sin entender nada, fue a buscar a Bai Yu.

La habitación de Bai Yu estaba justo frente a la suya. Lewis abrió la puerta de golpe y exclamó con su voz fuerte: "¡Bai Yu, me soltaron! ¿Fuiste tú quien movió hilos?"

Estaba lleno de dudas. Durante esas horas encerrado en la cabina, Lewis había estado angustiado, pensando en cómo reunir el dinero suficiente para pagar sus enormes deudas de juego. Pero antes de que pudiera resolverlo, lo habían dejado salir sin que él hiciera nada.

El dinero que tenía Bai Yu claramente no era suficiente para saldar la deuda, y en el barco, la única persona que conocía era Bai Yu.

Bai Yu respondió con indiferencia: "Pedí un favor".

Lewis se desplomó en el sofá: "¿Pediste un favor? ¿Tanto dinero? ¿De dónde lo sacaste? Te conozco desde hace años, nunca imaginé que fueras un millonario oculto... Eh, ¿de dónde salió ese gato?"

Bai Yu estaba recostado junto a la ventana de piso a techo, leyendo un libro y tomando café, mientras con su otra mano acariciaba a un pequeño gato.

El gato era completamente blanco con un tono platino, su pelaje era esponjoso y su larga cola, parecida a la de una ardilla, se balanceaba de un lado a otro. Estaba acurrucado en el regazo del médico, durmiendo plácidamente. Cuando escuchó a Lewis, el gato abrió perezosamente sus ojos de color azul claro, lo miró por un momento y luego volvió a dormirse.

El médico acarició su barbilla y alisó el pelaje en su espalda.

"Vaya, es un gato de raza pura, esto debe valer una fortuna. ¿De dónde lo sacaste?" Lewis se acercó y extendió la mano para acariciar al gato.

Pero antes de que pudiera tocarlo, el gato de repente movió su cola, golpeando su mano, y luego lo miró con desdén. Se sacudió, se puso de pie y saltó ágilmente al hombro del médico.

—¡Qué clase de persona se atreve a tocar a este gran duque sin permiso!

"Vaya, tiene carácter este gato", dijo Lewis sorprendido. "Es increíble, normalmente los gatos siempre me prefieren a mí y te detestan a ti, pero este parece distinto."

Bai Yu era médico y siempre tenía ese olor a desinfectante en su cuerpo. Lewis, por otro lado, era dueño de una tienda de mascotas y solía jugar con los gatos, ofreciendo premios y entreteniéndolos. Generalmente, los gatos preferían a Lewis.

El rechazo del gato evidentemente despertó el espíritu competitivo de Lewis. Se arremangó, decidido a ganarse al gato platino.

El pequeño gato se puso de pie, le bufó, y parecía dispuesto a arañarlo si se acercaba más. Bai Yu apartó la mano de Lewis de golpe y, con frialdad, dijo: "Este no lo puedes tocar."

El médico raramente era tan serio. Lewis, un poco avergonzado, retiró la mano y se dejó caer en el sofá nuevamente: "Vale, pero en serio, ¿de dónde sacaste a este gato? No habrás robado la mascota de algún turista del crucero, ¿verdad?"

Lewis entonces frunció el ceño: "Bai Yu, déjame advertirte, en las cabinas normales no permiten mascotas, solo en las suites y las habitaciones VIP. Los dueños de esas habitaciones son todos personas adineradas e influyentes. Si te llevaste el gato de alguien, ¡cuidado! El dueño podría venir a buscarlo."

Los NPC de novelas abusivas no dan buenos resultadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora