Los NPC de novelas abusivas no dan buenos resultados

[3.86] QUIÉREME(S/E)

[3.86] Médico veterinario frio v/s Duque que puede transformarse en gato

QUIÉREME

La sangre bajaba por el filtrum, gota a gota, y la visión de Bai Yu se oscurecía. Se apoyó en el escritorio para sostenerse un momento, pero finalmente no pudo resistir la somnolencia y, antes de cerrar los ojos, escuchó el sonido de una silla cayendo al suelo.

El duque Imur se levantó de golpe.

Chocó contra la mesa y las sillas, y los documentos se esparcieron por el suelo. Sin embargo, al duque no le importó. Se arrodilló sobre una rodilla en el escritorio del médico y extendió la mano para agarrar la de Bai Yu, exclamando con voz entrecortada: "¡Bai Yu!"

En la mansión del duque, el médico normalmente llevaba una máscara, pero el duque se la quitó, revelando el hermoso rostro del médico. Fue entonces cuando Imur notó que el semblante de Bai Yu estaba terrible.

Sus labios estaban de un color azul oscuro, su cabello negro, perfectamente peinado, estaba empapado en sudor, con un mechón colgando desordenado. Sangre fluía desde la comisura de sus labios y su nariz, formando hilos que no dejaban de caer.

Imur intentó limpiarlo con un pañuelo, pero por más que lo hacía, no podía detener la sangre, que seguía fluyendo, tiñendo de rojo la mitad del pañuelo. Cuanto más intentaba limpiarlo, más sangre salía, y su mano temblaba cada vez más. Cuando finalmente llegaron los médicos, sus manos ya temblaban incontrolablemente.

Los guardias trasladaron a Bai Yu a la cama, mientras Imur, apoyándose en el escritorio, se levantaba. Aturdido, bajó la mirada hacia el pañuelo en su mano, viendo el rojo brillante que casi lo hizo perder el equilibrio.

... ¿Qué le pasaba al médico?

... Esa misma mañana estaba bien.

Se quedó de pie en la puerta, agarrando el pañuelo, observando cómo el cuarto se llenaba de personas que iban y venían. El médico anciano de cabello canoso utilizaba algunas herramientas de diagnóstico extrañas y extrajo varias muestras de sangre de Bai Yu. Todos estaban ocupados y ansiosos, menos Imur, que permanecía inmóvil en la entrada, sin saber qué hacer.

Algunos revisaban la respiración, otros el pulso. Imur quería ayudar, pero su estatus como duque solo era un obstáculo. No se atrevía a acercarse ni a hacer preguntas, temiendo que presionaría más a los médicos. Así que simplemente se quedó junto al marco de la puerta, observando sin poder ver a Bai Yu desde esa posición.

El tiempo de espera se alargaba interminablemente. Cuando finalmente terminó la primera etapa de la atención médica, y los tratamientos posteriores dependían de los análisis de sangre, el anciano médico dejó de trabajar, e Imur finalmente pudo preguntar con una voz ronca: "¿Qué le pasa?"

El anciano médico respondió: "Parece envenenamiento."

La residencia del duque ya había tenido bastante contacto con la Hermandad de la Túnica Negra, y había prisioneros en sus calabozos que sufrían enfermedades que necesitaban tratamiento. Así que cuando Bai Yu cayó enfermo, no les fue difícil identificar la causa.

Sin embargo, no existía un antídoto adecuado para ese tipo de veneno, y el tratamiento estaba bajo el control de la Hermandad de la Túnica Negra. Tras pensarlo un momento, el médico anciano decidió no arriesgarse con ningún medicamento.

Le explicó la situación al duque, cuyo rostro se volvió sombrío de inmediato. Casi apretando los dientes, el duque esbozó una sonrisa feroz: "¿La Hermandad de la Túnica Negra, dices?"