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—¡Amalia!—exclamé haciendo que se girase hacía a mí
—¿James, que haces aquí?
—Oh—me fijé en su vestimenta — así que rojo eh, pensaba que no te gustaba —Amalia llevaba una falda roja como no de flores, con una Camiseta blanca atada en forma de corazón, lleva un lazo rojo junto a unas converse rojas y llena de complementos
—Nunca dije que no me gustase, solo dije que era un color fuerte
—Es lo mismo
—No lo es— frunció el ceño— ¿Qué haces aquí?
Me encogí de hombros — vengo a la reunión
Amalia entrecerró los
ojos— pero...dijiste que no querías venir
—He cambiado de idea, por cierto toma—le pase la bolsa de supermercados — es para ti

Amalia agarró la bolsa confundida, pero cuando la abrió su cara cambió a una de sorpresa

—Quería disculparme por la discusión del otro día así que...es una ofrenda de paz
—James no se que decir...yo no estaba enfadada solamente... en serio no hacía falta esto—intento devolverme la bolsa
—O no es tuya— insistí levantando las manos
—El supermercado está lejos ¿Has ido hasta allí solo para comparar leche y fresas?
Me encogí de hombros —¿Significa que me perdonas?
—Eres idiota James— río —anda vamos pasemos antes de que se haga tarde ¿Has traído la biblia?
—Obviamente — respondí
Ambos comenzamos a andar con una sonrisa hasta que me di cuenta de algo...Estoy a punto de entrar en la secta de nuevo

....

Me sobé el brazo por tercera vez después del tercer golpe que me dio Amalia para que cerrase los ojos
Pero era imposible necesitaba abrirlos.
Un chico estaba de pie presentando la reunión, me sorprendió ver a tantos jóvenes aquí sentados, pensaba que la religión solo era para viejos

Amén — gritaron a coro, está vez sí entré, le guiñe un ojo a Amalia que sonrió al darse cuenta qué esta vez lo hice bien
—Que Dios os bendiga a todos y bienvenidos una tarde más a esta reunión
Amén
—Esta tarde va a ser un poco más caótica que otros días — me miró — Hoy tenemos muchas cosas que hacer lo siento James es tu primera reunión y hoy nos dedicaremos a preparar las cosas para la obra, me hubiera gustado que estuvieras mientras oramos y leíamos la biblia...
—Pero no te preocupes — le cortó una chica de pelo afro— habrán muchas más reuniones así, para ser tu primera vez mejor será que nos vayas conociendo
Asentí sonriendo— con estar aquí me vale—todos me miraron con una sonrisa agradable, nadie puede decirme que no estudie el papel de chico cristiano perdido
—Bueno—  el chico se puso
en pie —Me llamó Alex encantado
—Yo Anelis—dijo la chica de pelo afro
—Yo me llamó Dalia—dijo la chica de pelo azul que Amalia señaló el otro día
—Dix —se presentó un chico de pelo negro con tatuajes, yo le mire un poco confundido por su apariencia
—! Yo Max!—exclamó un chico de pelo rapado entrando a toda velocidad
—El día que Max llegué pronto será la venida de Dios—dijo Anelis
Mire a Amalia confundió ¿Acaso eso era un profecía de esas?
—Es una broma—susurro riendo—una expresión
—Y por última y no menos importante ¡Rut!— se presentó contenta una chica de pelo ondulado
—ella es mi otra mejor amiga— susurró Amalia
—Oh, encantado —dije a todos — yo me llamo James
—Ya lo sabemos — dijo Max— Amalia habla mucho de ti...
—! Eso no es así!—exclamó con las mejillas rojas— ¡Solo os dije que hice un nuevo amigo....
—Oh si siempre habla de ti, James esto, James lo otro—Max le corto
—Hoy James me ha a llevado al lago
—James me ha dicho su color favorito
—He comido fresas con James

Amalia se cruzó de brazos y se fue a sentarse en el banco con su biblia
Yo solo pude reír por la burla de sus amigos

—Creo que se ha enfado—dije divertido
—Oh ya se le pasará ven— dijo Alex —¿sabes tocar algún
instrumento? —preguntó mientras subíamos al escenario
—Oh, bueno yo...hace mucho tocaba el piano —y cuando digo mucho me refiero a años...
—¡Genial toca!- exclamó la chica que se llamaba Rut sentándose en la batería — Nos viene bien ahora que no está Drake
—¿Quién es Drake?—pregunté
—Nuestro pianista, pero tiene un esguince en la mano, podrías ocupar su lugar en la obra — dijo Alex
—Oh, pero hace mucho que no toco, en serio—dije
—bueno, práctica con nosotros —dijo Dix agarrando la guitarra
Todos empezaron a afinar sus instrumentos, yo aproveché para probar si seguía en forma, sería muy vergonzoso si ahora me fuese de tono.

Flechazo por equivocación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora